La Plataforma de Excelencia en Biotecnología Azul ha pasado a denominarse Bioasis Gran Canaria y espera captar una inversión de unos 60 millones de euros para el desarrollo de la economía azul en la Isla, según anunció ayer el presidente del Cabildo de Gran Canaria, Antonio Morales, tras una reunión en la que participaron el consejero regional de Economía, Pedro Ortega, el rector de la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria, Rafael Robaina, y representantes de las entidades públicas y empresas involucradas en el proyecto.

Morales explicó que en los dos próximos años se invertirán siete millones de euros para impulsar el sector de la economía azul, con varias líneas de trabajo que serán desarrolladas a través de Bioasis Gran Canaria.

Así, declaró que la Secretaría de Estado de I+D+I se ha comprometido a aportar al Cabildo una partida que asciende a 4,5 millones de euros, que incluye 1,5 millones de euros en dos años para infraestructuras y equipamientos vinculados a las instalaciones de Instituto Universitario Ecoaqua, el Instituto Tecnológico de Canarias y el Banco Español de Algas.

"Además de estos 4,5 millones, la Isla contará con una inversión de 2,5 millones de euros de la Agencia Canaria de Investigación, Innovación y Sociedad de la información del Gobierno de Canarias para el área experimental de Arinaga", apuntó Morales, quien resaltó que se recuperará un área de suelo público cedido en su día a la Autoridad Portuaria para concentrar instalaciones dedicadas al cultivo y la producción de microalgas y acuicultura.

Incubadora

La Sociedad de Promoción Económica del Cabildo está tramitando una petición adicional de 1,3 millones de euros para una incubadora de alta tecnología, un espacio de simulación a pequeña escala de diversas propuestas que posteriormente puedan ser trasladadas al ámbito empresarial.

En conjunto, todas estas actuaciones están encaminadas a movilizar en los próximos tres años alrededor de 60 millones de euros de inversión privada, proyectos empresariales que se están analizando y que "son de singular trascendencia" en la Isla, explicó el consejero insular Raúl García Brink.