El servicio municipal de recogida de animales de San Bartolomé de Tirajana tenía ayer que hacer lo que parecía ser una sencilla labor de hacerse cargo de unos perros supuestamente abandonados junto a una casa terrera en Juan Grande. Sin embargo, todo pasó a ser una gran sorpresa y a ser una complicada tarea. Los trabajadores municipales encontraron, pasadas las dos de la tarde de ayer martes, un total de 19 perros, mestizos, en el exterior de la vivienda. Asimismo, hallaron otros cinco canes en el interior del inmueble, en lugares como el congelador, la cama y en varios cajones.

Este descubrimiento sobre los perros está relacionado con que la residente en esta casa es una mujer, con una edad entre 50 y 60 años, con presuntas facultades mentales trastornadas. Se baraja de que se trate de un caso de síndrome de Diógenes.

Estos trabajadores, como los agentes del Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona) de la Guardia Civil que se desplazaron a Juan Grande por un presunto caso de maltrato de animales, vieron que en la casa se acumulaba gran cantidad de basura de todo tipo, no sólo ropa, botellas de plástico y latas, sino también de excrementos de los perros.

Fueron recogidos cada uno de los 19 canes vivos que estaban fuera de la vivienda y presentaban un "pésimo estado", como indicaron fuentes de la Comandancia de Las Palmas. Los miembros del Seprona también indicaron la existencia de "señales de canibalismo" entre los perros.

También fueron retirados cada uno de los cinco animales que estaban muertos dentro de varias cajones, de un congelador y de una cama. En ésta fue hallado uno bien tapado por una manta. Algunos de estos perros estaban vestidos con ropa de niño.

La mujer que vivía en dicha casa fue atendida por personal de una ambulancia del Servicio de Urgencias Canario (SUC), así como trasladada después a un centro con unidad psiquiátrica.

Los agentes de la Benemérita informó de todo lo relacionado con la afectada, la situación de los perros y de la vivienda al juzgado de guardia de los Juzgados de San Bartolomé de Tirajana.

Estupefacción

El hecho de descubrir el mal estado de salud de una persona, así como en el que se encontraban los 24 perros, fueron motivo de sorpresa e incredulidad por parte de los trabajadores, así como de vecinos de Juan Grande.

Según fuentes consultadas por este periódico, la mencionada casa terrera se encuentra en una zona "muy distanciada" de otras viviendas. "Muy separada y alejada de todo", comentó un vecino, que se había quedado extrañado al ver la presencia de varios vehículos, exactamente del Ayuntamiento de San Bartolomé de Tirajana y de la Guardia Civil, en un sitio donde no era frecuente.

Tras darse a conocer qué encontraron los testigos del hallazgo, algunos hablaban de maltrato de animales, al tiempo que otros vecinos lo desmentían.

"Nos sospechábamos que algo pasaba algo allí porque no era normal ver tantos perros sueltos en los alrededores de la casa esa, blanca", comentó otro residente, que con cierta frecuencia pasaba por allí.

Esta persona y otro vecino pidieron que "se hable con fundamento y exactitud, y no tanto de que si tratan mal a los animales, que por supuesto no deben sufrir daño. Lo más importante de esta situación que hay una mujer enferma".