El Cabildo de Gran Canaria inicia este lunes los trabajos de reparación de la carretera de Risco Blanco (GC-654) en San Bartolomé de Tirajana, en el tramo entre Risco Blanco y La Culata, que está situado junto a un estanque lo que ha provocado el deterioro y la inestabilidad de la plataforma de la carretera, informa el consejero de Obras Públicas e Infraestructuras, Ángel Víctor Torres.

La obra, con un plazo de duración aproximado de 2 meses y un presupuesto de más de 50.000 euros, incluye la colocación de una losa de hormigón armado en todo el ancho de la carretera para generar una plataforma estable y asegurar la circulación con garantías de estabilidad y que permita el paso simultáneo de vehículos en ambos sentidos.

“La acción del agua ha dañado la carretera, con numerosas grietas en el firme, hasta el punto de que ahora mismo no permite el paso de dos vehículos a la vez, un estrechamiento peligroso que vamos a resolver para garantizar la seguridad”, subrayó el también vicepresidente primero. Para garantizar la seguridad de los usuarios de la vía, durante la ejecución de la obra se procederá al cierre total de la carretera, aunque se garantizará el acceso a los residentes.

Los usuarios deberán estar atentos a los desvíos para los recorridos alternativos que se realizarán por Santa Lucía (GC-65) para acceder a los barrios de Taidía y Risco Blanco, y por Tunte (GC-60) para las personas que quieran acceder a La Culata y Agualatente.