El Cabildo de Lanzarote negocia "con varias entidades bancarias" la solicitud de una póliza de crédito para hacer frente a la deuda de 1.300.000 euros que mantienen los Centros Turísticos con el Ayuntamiento de Haría en concepto del canon de explotación del Mirador del Río, Jameos del Agua y la Cueva de los Verdes, espacios situados en el municipio norteño. Las partidas adeudadas corresponden en su mayoría a los años 2008 y 2009.

El consejero de Hacienda y Contratación, Luis Arráez, dijo ayer, tras la sesión plenaria celebrada en el Cabildo, que además de ese préstamo "se realizará una operación de tesorería para pagar los atrasos, los cuales están reflejados en los presupuestos anteriores de la Epel (Ente Público Empresarial que gestiona los Centros)". Arráez no precisó la cantidad por la que finalmente se suscribirá el préstamo, toda vez que la misma dependerá "de lo que nos estén dispuestas a dar las instituciones financieras y de las propuestas que nos realicen al respecto".

Además de Haría, Yaiza está pendiente de recibir unos 200.000 euros y Tinajo, alrededor de 650.000, según explicó Arráez, todo por el funcionamiento de las instalaciones turísticas de Montañas del Fuego. Las cuentas de la Epel para este ejercicio sólo contemplan 600.000 euros para rebajar la cifra aún por abonar a esos tres consistorios municipales.

Un gran lazo amarillo luce desde el pasado miércoles en la fachada de la Corporación de Haría en protesta por la deuda de los centros. La institución repartirá lazos entre la población para que se una a la reivindicación.

El Cabildo tampoco aceptará la queja de San Bartolomé a sus cuentas, que reclama 799.348 euros para acometer obras de alumbrado público en su comarca, porque el convenio en el que se pretende incluir esa inversión se cerró en 2006 y el proyecto se presentó en octubre de 2008.

Las empresas UTE Casa Cabildo de Lanzarote, que ejecutó la ampliación de ese edificio, y VVO Construcciones y Proyectos SA, que construyó el teatro de Arrecife, piden unos 800.000 euros que no han recibido por las obras. Dichas deudas están recogidas en el presupuesto, pero de las mismas se deben restar "la penalización" correspondiente por el retraso en la entrega de los trabajos, indicó Arráez.