El agujero económico que ha provocado la quiebra de turoperadores y agencias de viajes nacionales e internacionales entre los establecimientos turísticos de Lanzarote supera los tres millones de euros. Unas cantidades que no podrán ser recuperadas hasta al menos dos años en espera de que se resuelvan los distintos contenciosos administrativos y judiciales que se han iniciado por los empresarios lanzaroteños contra los intermediarios turísticos.

La quiebra del turoperador irlandés Budget Travel en noviembre del pasado año ha sido el que ha provocado la mayor deuda con los complejos alojativos de la Isla. El gerente del Patronato de Turismo de Lanzarote, Héctor Fernández, señala que se han mantenido diferentes reuniones en Irlanda para acogerse a una especie de fondo de garantías creado por el Estado irlandés para el pago de las deudas generadas por las empresas en suspensión de pagos.

Sin embargo, el proceso podrá alargarse durante varios años, lo que sin duda supondrá un enorme perjuicio para unos establecimientos afectados en los últimos meses por la bajada de turistas por crisis económica y por las cancelaciones originadas por la nube de cenizas del volcán islandés.

El turoperador Budget Travel era hasta noviembre del pasado año el segundo en importancia de los que operaban desde Irlanda con Lanzarote. Sólo en el último año trajo hasta la isla unos 30.000 turistas en paquetes vacacionales de una media de diez días de estancia. Unas contrataciones fundamentalmente con apartamentos y complejos alojativos y un nivel de gasto muy superior al resto de turistas de otras nacionalidades.

Las graves dificultades económicas por las que atraviesa el grupo Marsans también han afectado a un importante número de hoteles y complejos lanzaroteños. El pasado febrero la Asociación Insular de Empresarios de Hoteles y Apartamentos de Lanzarote (Asolan) organizaba una serie de encuentros con las empresas afectadas para estudiar las estrategias jurídicas para el cobro de estas deudas.

El acuerdo adoptado fue el de presentar, de forma conjunta, en el juzgado de lo Mercantil Nº 12 de Madrid la solicitud de concurso de acreedores contra Viajes Marsans por una deuda superior a los 300.000 euros. En un principio a esta solicitud se han incorporado el Arrecife Gran Hotel, el hotel Princesa Yaiza, Apartamentos Los Zocos, apartamentos Lomo Blanco y dos hoteles del grupo Daminvest.

Las compañías aéreas Futura y XL Airway fueron las primeras empresas que sucumbieron en el 2008 a la crisis económica mundial y que originó las primeras cancelaciones de paquetes vacacionales en Lanzarote. Sólo Futura había trasladado el anterior ejercicio a unos 130.000 turistas a la Isla, mientras que XL Airways transportó a otros 55.000 pasajeros.