El alcalde de Arrecife, Cándido Reguera, ha designado por decreto a la hija de Dimas Martín, Elena Martín (que ostenta también la jefatura del Departamento de Contratación del Ayuntamiento de Arrecife) para desempeñar provisionalmente el cargo de secretaria general del consistorio. Un cargo, considerado, junto al de Interventor, fundamental para ejercer el control de la legalidad de la gestión administrativa y de los fondos públicos de las corporaciones.

El Ayuntamiento de Arrecife carece desde febrero de 2005 de la plaza de secretario habilitado por el Estado tras hacerse efectiva la destitución de Felipe Fernández Camero. Fue en septiembre de 2004 cuando Camero fue destituido por orden de la Secretaría de Estado de Organización Territorial por la falta muy grave de ser miembro de consejos de administración de empresas para las que no era susceptible la compatibilidad y por haber ejercido su profesión de abogado durante 14 años sin el preceptivo acuerdo plenario.

Desde ese momento, la plaza de secretario la han ejercido de forma accidental hasta cuatro funcionarios del Ayuntamiento, que cuentan con la licenciatura de Derecho (carrera imprescindible para ostentar este puesto) pero sin concursar a las oposiciones que se realizan a nivel nacional. Aunque la plaza ha salido a concurso público hasta el momento ha quedado desierta.

La funcionaria Azenet Padrón es la titular de esta plaza desde febrero de 2005, aunque su puesto ha sido ocupado también por otros tres trabajadores (Javier López, Pilar Machín y Elena Martín).

Martín se vio implicada en la Operación Unión contra la corrupción en el Ayuntamiento de Arrecife cuando fue detenida por la Guardia Civil durante el registro realizado al consistorio. Martín fue puesta en libertad al día siguiente sin que haya trascendido los cargos que se le podría imputar. La hija de Dimas asumirá la secretaría durante las vacaciones tanto de Javier López como de Pilar Machín.

Dimas Martín, imputado por cohecho y asociación ilícita, está considerado dentro del caso Unión como el cerebro de la trama por el presunto cobro de comisiones ilegales a empresas que trabajaban para el Ayuntamiento de Arrecife.