El presunto autor de la muerte de Gerardo Miguel Romero González en Caleta del Sebo (La Graciosa), Sebastián Bermúdez Hernández, prestó ayer declaración ante el juez instructor del caso, César Romero Pamparacuatro (titular del Juzgado número cinco de Arrecife, coordinador de las investigaciones contra la corrupción en Lanzarote y al que le correspondió este asunto al encontrarse de guardia). El magistrado decidió encarcelarlo provisionalmente en la cárcel de Tahíche con el cargo de homicidio.

Sebastián Hernández, al que todos acostumbran a llamar Chani, fue trasladado al Palacio de Justicia de Arrecife a primera hora de la mañana para ser puesto a disposición judicial después de haber permanecido en el cuartel de la Guardia Civil desde el pasado jueves, día de su detención como sospechoso de la muerte de Gerardo Miguel Romero. Su declaración arrancó sobre la una de la tarde y se prolongó durante aproximadamente dos horas. A a las 15.50 horas, un vehículo de la Guardia Civil abandonó el garaje de los juzgados con él agazapado en su interior para trasladarlo al centro penitenciario de Tahíche.

Según varias declaraciones, el fallecido, agonizante, fue el primero en asegurar antes de expirar que había sido el propio Sebastián quien lo había apuñalado tras una discusión que habían tenido. La Benemérita detuvo a Sebastián en su casa y éste reconoció que había agredido a Gerardo Miguel. Allí encontraron también las tijeras con las que le habría causado la muerte.