Los pescadores tienen que ser conscientes de que durante toda la semana hemos estado prácticamente en alerta por fuerte oleaje". El jefe de Protección Civil de Yaiza, Patri Cazorla, recordaba ayer que hay que tener mucha precaución y evitar por todos los medios acercarse al litoral cuando se activan las alertas.

La desaparición ayer del joven polaco se une al fallecimiento de Manuel Barbazán, el pescador de 66 años que perdía la vida el pasado jueves en el muelle de Sardina del Norte tras un golpe de mar. Un día en el que la Agencia Estatal de Meteorología había activado la alerta naranja por fuerte oleaje en Canarias.

Una trágica historia que por desgracia se repite en unas islas en las que el mar se tiñe de luto en demasiadas ocasiones.

La peligrosidad del litoral entre el Faro de Pechiguera y la zona de Las Maretas en Playa Blanca ha supuesto el fallecimiento de varias personas. En noviembre de 2009 otro hombre de 38 años perdía la vida en la misma zona del Caletón de Ginés cuando manipulaba erizos. Ese mismo año, pero en febrero, otro chico de 30 años también fallecía cerca de las salinas.

Más pérdidas

Un año antes otro pescador moría en la zona del Golfo también en Yaiza cuando pescaba con un amigo. Una muerte que se unía a la de un joven de 31 años en la zona de Los Hervideros en mayo de 1999. Una lista de desgracias que también terminó con la vida de Manuel, de 53 años cuando estaba pescando en la zona de Las Maretas.

Los servicios de emergencia destacan que es fundamental que los pescadores dispongan de un material básico para practicar este deporte, que provoca demasiados accidentes y fallecimientos. Calzado adecuado e incluso un chaleco salvavidas pueden ser vitales para evitar una desgracia. "El chaleco salvavidas te puede mantener a flote durante mucho tiempo sobre todo cuando has podido recibir un golpe en la cabeza o en otras partes del cuerpo que te impide nadar", señalan.