El Gobierno de Canarias, la compañía Fred. Olsen, los cabildos y las cámaras de comercio de Lanzarote y Fuerteventura se comprometieron ayer en redoblar sus esfuerzos para propiciar la puesta en marcha de una línea marítima que conecte a las islas con los principales puertos de Marruecos. La opción más factible sería la apertura de una ruta entre Fuerteventura y la localidad marroquí de Tarfaya, aunque también cabría la posibilidad de incluir una línea con el puerto de El Aaiún.
El presidente del Gobierno canario, Paulino Rivero reconoció durante la presentación en Arrecife de la línea de Fred. Olsen entre Gran Canaria, Fuerteventura y Lanzarote, que lleva operando desde hace ocho meses, que favorecer la conectividad marítima y la internacionalización de la economía canaria mirando especialmente hacia el continente africano son dos objetivos de su Ejecutivo.
El director general de Fred. Olsen, Sebastián Cerezo, reconoció que uno de los grandes proyectos de su compañía era unir a las islas con Marruecos, aunque para ello era necesario consolidar aún más la línea entre los puertos de Gran Canaria, Fuerteventura y Lanzarote. De hecho, solicitó el apoyo de instituciones y empresarios para lograr que "esta inversión sea un proyecto de futuro".
Capacidad
El objetivo es que el mismo barco que cubre esta línea, que actualmente es el Betancuria (con capacidad para 1.110 pasajeros y 54 camiones o 450 coches), sea también el que conecte a las islas con Marruecos. La propuesta consistiría en cargar el barco en Lanzarote el viernes para partir luego hacia Gran Canaria y de allí hasta Fuerteventura, desde donde partiría el sábado hacia Marruecos, bien hacia Tarfaya o El Aaiún. Está previsto que el puerto de Tarfaya esté operativo a finales de 2013 o comienzos de 2014, aunque podría iniciarse antes la línea con El Aaiún.
