La Graciosa forma parte del parque natural del Archipiélago Chinijo por lo que todas sus actividades tienen que estar en sintonía con la normativa de este espacio protegido. Una situación que, por ejemplo, impide que los restos de las podas de los jardines públicos y privados puedan quemarse como se venía haciendo tradicionalmente, lo que obliga a la colocación de bandejas especiales para trasladar los residuos vegetales hasta el vertedero de Zonzamas en Lanzarote.

Sin embargo, en el pequeño núcleo de Pedro Barba (situado a varios kilómetros de Caleta de Sebo) donde existe el mayor número de ejemplares de palmeras de esta isla y diversos jardines, se ha acumulado una gran cantidad de basura vegetal ante la sorpresa de los turistas que se acercan hasta este extremo de La Graciosa.

"Antes los vecinos de Pedro Barba quemaban todos estos restos vegetales que iban acumulando pero ahora está prohibido", señala Alicia Páez. El objetivo del Ayuntamiento de Teguise es quitar toda esa poda al igual que se hace en Caleta de Sebo para trasladarla hasta Lanzarote en barco.

El Ayuntamiento también se encarga de retirar de forma periódica los residuos urbanos que se generan en Pedro Barba y que los vecinos acumulan en unos cuartos especiales hasta que llega el camión municipal.

El sellado de los vertederos incontrolados ha sacado a relucir los enormes problemas que tienen los gracioseros para deshacerse de sus residuos. La planta de transferencia (la compactadora de basuras) no puede asumir todo tipo de residuos por lo que el Ayuntamiento se ha visto abocado a realizar un plan que contemple hasta el más mínimo detalle. Enseres, podas, vidrios, escombros... miles de kilos de basuras que deben ser enviados sin excepción a Lanzarote.