El varamiento de una hembra adulta de delfín moteado (Stenella frontalis), ayer, en la playa de Los Pocillos, a la altura del hotel San Antonio, en Puerto del Carmen (Tías), sorprendió a los turistas que se encontraban en la zona, los cuales pidieron auxilio a otros usuarios de la playa y el personal del establecimiento para intentar salvar el animal, además de comunicar el hallazgo a la centralita del Servicio de Urgencias Canario 112.

Efectivos de la Policía Local de Tías y del Servicio de Protección de la Naturaleza de la Guardia Civil (Seprona) acudieron al lugar de los hechos, así como integrantes de la Sociedad para el Estudio de los Cetáceos en el Archipiélago Canario (Secac), entre ellos su presidente, Vidal Martín, y las biólogas Marisa Tejedor y Mónica Pérez. Ante la proximidad del hotel y después de varios intentos fallidos de devolver el cetáceo al mar, se decidió trasladarlo en una hamaca hasta una de las piscinas de agua salada del complejo hotelero, en concreto, a la destinada a los niños.

El delfín, de 173 centímetros de longitud, estaba "convulsionando y por los movimientos que realizaba se notaba que estaba enfermo", aseguró Tejedor. Añadió que "cuando un cetáceo se siente así, lo que busca es acercarse hasta la costa para morir tranquilo en vez de perecer ahogado". Se desconocen las causas que provocaron la agonía de este mamífero, por lo que la necropsia que hoy se le practicará permitirá conocer los motivos que condujeron a su deterioro. No se descarta que estuviera a punto de parir o acabara de dar a luz una cría.

Los esfuerzos para que reviviera fueron imposibles, por lo que "para que no siguiera sufriendo se decidió aplicarle la eutanasia", explicó Tejedor.

La jefa de recepción del San Antonio, Dacnar Svobodova, manifestó que "los clientes del hotel no dejaban de preguntar qué iba a pasar con el delfín, si se iba a morir o no. No dejaron de sacarle fotografías. Quedaron muy apenados porque al final no pudieron salvarlo".

La presencia de delfines moteados es habitual en aguas canarias durante todo el año y se reproducen en el Archipiélago. Al año varan una media de treinta cetáceos en las Islas, de los cuales "dos o tres son este tipo de delfines", dijo Tejedor.