La conexión marítima entre Arrecife y Puerto del Rosario con Cádiz corre peligro de desaparecer después de que haya quedado desierto el concurso convocado por la Dirección General de Marina Mercante para subvencionar estas escalas al no presentarse ninguna naviera dispuesta a cubrir esta ruta a partir del próximo mes de septiembre. La reducción de un 30% en la subvención que el Estado otorgaba a las navieras para prestar este servicio ha supuesto el plante de la compañía Acciona Trasmediterránea, la única que hasta ahora estaba uniendo a las capitales de Lanzarote, Fuerteventura y La Palma con el puerto de Cádiz.

En estos momentos, el barco Murillo de Acciona enlaza semanalmente a los puertos canarios de Lanzarote, Fuerteventura, Gran Canaria, Tenerife y La Palma con el puerto de Cádiz. Sin embargo, las conexiones con Gran Canaria y Tenerife están garantizadas al estar catalogadas estas líneas como de Obligatoriedad de Servicio Público (OSP). Una consideración que no tienen el resto de los puertos canarios pero que se compensaba hasta ahorta con las ayudas que concede el Estado para incluir a las islas no capitalinas.

La Cámara de Comercio de Lanzarote ha sido la primera institución en dar la voz de alarma por las graves repercusiones que podría tener la anulación de estas escalas para las economías de las islas.

De hecho, la Cámara de Comercio de Lanzarote viene reivindicando, desde su nacimiento, en 2006, que esta ruta debía ser considerada de Interés General, bajo la denominación OSP, como sucede para el mismo barco y ruta con las islas de Gran Canaria y Tenerife, donde el barco seguirá viajando, saltándose, en caso de que no se renueve el contrato, los puertos de las islas de Lanzarote, Fuerteventura y La Palma.

Según el presidente de la Cámara de Comercio de Lanzarote, José Torres, el barco que cubre actualmente la ruta entre Arrecife - Cádiz, "resulta fundamental para la isla, ya que de él depende la entrada de alimentos frescos procedentes de todo el sur peninsular cada miércoles por la noche", señala.

Un barco que posteriormente regresa cada sábado directo hacia Cádiz, donde recoge pasaje, vehículos y carga. De hecho, "Piscifactorías del Atlántico", principal industria exportadora en la isla dedicada al cultivo de lubinas y doradas en granjas marinas, envía pescado fresco cada sábado hacia la península, que también se vería afectada.

El senador por Lanzarote, Óscar Luzardo, aseguró ayer que está en permanente contacto con la Dirección General de Marina Mercante para buscar una solución a este problema. "Tengo el compromiso del director general de que no se anularan las escalas ya que es posible que se pueda renovar el contrato con la actual operadora Acciona Trasmediterránea", señala Luzardo.