Tres comercios de la zona centro de Arrecife fueron asaltados el pasado fin de semana, entre las madrugadas del sábado y el lunes mediante el mismo procedimiento. Una o varias personas rompieron las cristaleras de los escaparates y se introdujeron en su interior para robar mercancía.
La Policía Nacional detuvo en la madrugada de ayer en Arrecife a un hombre con los artículos que, presuntamente, había sustraído de la tienda Base Sport, situada en la calle Fajardo. Se trata de conjuntos de chándal de mujer que pertenecían a "un perchero completo" y que al ser devueltos al negocio "tenían manchas de sangre, probablemente porque el ladrón se cortó con los cristales", afirmó Jonay Pérez, encargado de Base Sport. Por ahora desconoce la cuantía de los daños producidos.
Se desconoce si la persona detenida tiene que ver también con el resto de robos, afirmaron fuentes policiales.
No es la primera vez que Base Sport es objeto de un asalto de esas características. La ocasión anterior tuvo lugar en las Navidades, pero en el local de venta de productos outlet (fuera de temporada) situado en la misma vía, a tan solo unos metros de donde se produjo el suceso en torno a las 3.30 horas de este lunes, según el testimonio de una vecina que se despertó "por la rotura del cristal".
Arya fue otro de los establecimientos afectados, ubicado en José Antonio. Su propietario, Dipak Dadlani, fue avisado por la central de alarmas con la que contrató en su día esa medida de seguridad, a las 6.49 horas del domingo. "Se llevaron tres bolsos de más de 700 euros", indicó el empresario.
Seguridad privada en la calle
Dadlani considera que "ya que la vigilancia policial tanto por parte de la Policía Local como la Policía Nacional es poca y no se ve ni un alma por la calle, lo que tenemos que hacer es unirnos varios comerciantes y contratar seguridad privada para que vigile las calles por la noche, desde las 21.00 hasta las 8.00 horas del día siguiente. Está claro que algo tendremos que decidir", manifestó indignado.
Sonsoles Segura es encargada de la Óptica Centro, en la calle José Antonio, a tan solo veinte metros de Arya, que fue objeto de un asalto en la madrugada del sábado, el segundo en casi dos meses. El anterior fue el uno de febrero. "En ninguna de las dos ocasiones sonó la alarma", dijo Segura. La primera vez se llevaron gafas del escaparate valoradas en unos 2.000 euros. El sábado, como la óptica ya había decidido no poner más lentes en ese espacio tras el primer disgusto, lo que hizo el ladrón fue sustraerlas de un expositor de la pared. Se llevó ocho y tienen un valor en el mercado "de, al menos, 800 euros", aseveró la responsable de la óptica.
Una tapa de hierro de una arqueta de la compañía Telefónica de la acera, explicó Segura, "fue lo que cogió el ladrón para romper el cristal y entrar a robar". Ya ha decidido poner rejas para reforzar la seguridad.
María Jesús Martín, empleada de la óptica, recordó que "la Calle Real tuvo hace unos años a un segurita privado que pagaban los comerciantes para que vigilara los negocios. Si la policía no hace su trabajo, alguna decisión se tendrá que adoptar", señaló Martín.
A principios de febrero, dos tiendas de la cadena de ropa Medina en la Calle Real y Alférez Cabrera Tavío recibieron la visita de los amigos de lo ajeno, que tuvieron la misma forma de proceder que lo ocurrido el reciente fin de semana Lo mismo le pasó a esa firma lanzaroteña a mediados de diciembre. En dos de las tres ocasiones, los malhechores se hicieron con el botín, formado por varias prendas de marca.
