El cantante grancanario José Vélez fue el encargado anoche de poner el broche de oro a las fiestas patronales de Lanzarote, Un concierto en el que se dieron cita varios miles de personas, hasta el punto que la plaza de Mancha Blanca se quedó pequeña, aunque el espectáculo del artista teldense empezó casi 45 minutos después de la hora prevista en el programa de las fiestas. Unos festejos que después de varios años culminaron con una exhibición de fuegos artificiales, gracias, según apuntaba el alcalde, a que el Ayuntamiento incrementó un poco las tasas que se cobran a los chiringuitos instalados alrededor de la ermita.