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La presunción de inocencia absuelve al motorista acusado de hacer el caballito

Manuel Salces negó ser el conductor de la moto que circulaba en Arrecife

La presunción de inocencia absuelve al motorista acusado de hacer el caballito

El Juzgado de lo Penal Nº 1 de Arrecife ha absuelto de sendos delitos contra la seguridad vial a Manuel Cecilio Salces Álvarez, acusado de ser el motorista que circuló a gran velocidad haciendo el caballito el pasado 24 de octubre en la carretera de circunvalación de Arrecife, y al conductor del coche desde el que se realizó la grabación de esa acción temeraria, Oriol Suárez Rodríguez, que dos días después fue difundida por la aplicación móvil Whatsapp y las redes sociales. La Fiscalía pedía para cada uno de ellos dos años de prisión y seis años sin carné de conducir.

En su sentencia absolutoria, el magistrado Manuel Castro ha aplicado el principio de presunción de inocencia recogido en el artículo 24 de la Constitución Española, al no haber quedado acreditado que los procesados hayan sido los autores de los hechos.

Según la investigación de la Policía Local de Arrecife, ambos conductores transitaban a gran velocidad por la vía, que tiene un límite máximo de 100 kilómetros por hora. En el caso de la moto llegó a circular a 145 y 160 kilómetros por hora y el turismo llegó a alcanzar los 180 kilómetros por hora.

Manuel Cecilio (Manu) negó desde un primer momento, en su declaración policial y ante el juez, ser el conductor de la motocicleta Suzuki que corría durante algunos tramos apoyada únicamente en la rueda trasera. Su abogado, Manuel Alcalde, pidió para el la absolución porque no se había podido identificar al conductor de la moto.

El letrado de Oriol, Tomás Silvela, solicitó también la absolución para su cliente, y de forma subsidiaria, una multa por haber excedido el límite de velocidad. De hecho, Oriol reconoció durante el juicio celebrado el 25 de noviembre, que el coche que pilotaba es de su madre y se mostró "arrepentido por haber sobrepasado un montón el límite de velocidad y de acercarme para grabar, pero no hice nada malo". El primo de Oriol, Leonardo Cedrés, que iba sentado en el asiento del copiloto, fue el que realizó la grabación con su móvil.

El fallo, con fecha del 1 de diciembre, aún no es firme y cabe recurso de apelación en un plazo de cinco días desde su notificación a las partes.

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