Un año después de que el Ayuntamiento de Arrecife y el Cabildo de Lanzarote dieran su apoyo explícito a la construcción de un acuario en el Islote de la Fermina la iniciativa privada empieza a recibir las primeras zancadillas. El nuevo grupo de gobierno de Arrecife (PSOE, CC y PIL) ha decidido desmarcarse del proyecto del parque marino del Gran Acuario de Canarias al entender que en las actuales circunstancias es necesario valorar otras alternativas para el Islote.
El alcalde de Arrecife, José Montelongo (PSOE) aseguró ayer que la concesión administrativa de la Dirección General de Costas sobre el Islote de la Fermina sigue estando en poder del Ayuntamiento hasta el 2018, aunque reconoció que se está elaborando un informe sobre las consecuencias económicas que conllevaría para el Ayuntamiento la renuncia a esta concesión administrativa antes de esa fecha.
Montelongo entiende que hay que abrir un nuevo debate sobre el uso público del Islote, sobre todo a partir de la aparición de los denominados fondos IGTE (el extinto impuesto general por el tráfico de empresas, que el Estado destinará a las instituciones canarias). "Habrá que ver si es posible destinar parte de esos fondos al Islote", añade el alcalde.
De hecho, desde el Ayuntamiento ya se ha empezado a barajar algunas propuestas del pasado para el Islote como la construcción de un centro deportivo náutico e incluso retomar el proyecto del arquitecto Carlos Morales que en su día ganó un concurso de ideas para la zona elaborado por el Gobierno de Canarias.
El concejal de Turismo y teniente de alcalde, Rafael Juan González (CC) también es partidario de revisar el proyecto del acuario. Aunque reconoce que hace un año era la idea más viable para el Islote "ahora tendremos que valorar nuevas opciones", sostiene.
Los consejeros de Somos Lanzarote en el Cabildo se muestra contrario al acuario. "El Islote, que en la actualidad se encuentra en poder del Ayuntamiento de Arrecife por la vía de la concesión administrativa, tiene un enorme valor por su situación céntrica, condiciones ambientales y enorme potencial para el esparcimiento de la ciudadanía y quienes vistan Arrecife", aseguran. Así, apuestan por destinar una partida de los fondos IGTE a rehabilitar dicho entorno conforme a los valores que definen a Lanzarote como Reserva de la Biosfera y a la Marina de Arrecife como Sitio de Interés Científico, "permitiendo que la ciudadanía recupere un espacio único del litoral capitalino, alejándolo tanto del abandono como de pretensiones especulativas", afirman.
Los promotores del Gran Acuario de Canarias, con una inversión prevista de 26,9 millones de euros, presentaban el proyecto en febrero de 2015 a la Dirección General de Costas que es el organismo encargado de otorgar los permisos y la concesión administrativa. El objetivo era abrir las instalaciones en el verano de 2017 aunque la autorización no podrá llegar hasta que renuncie el Ayuntamiento a la concesión administrativa.
El parque tendría un auditorio para unas 300 personas y una sala de proyecciones con documentales con técnicas avanzadas sobre delfines y ballenas. Los promotores insisten en que el acuario no tendrá shows de delfines ni de ningún tipo de animal marino siendo los animales más grandes los tiburones angelotes y las rayas (chuchos). La mayor parte del acuario sería subterráneo, entre ellos un gran tanque de cinco metros de altura que será recorrido por un túnel de acrílico para los visitantes.
