¿Por fin podemos decir que la Charca de Los Clicos, en El Golfo (Yaiza), ha recuperado su superficie original, la que tenía hasta los años sesenta del siglo pasado, antes de las extracciones de arena de la playa?
Sí, la Charca de Los Clicos ha recuperado su superficie e incluso algo más, ya que se ha aprovechado para hacer una intervención que mitigue la necesidad de intervenciones posteriores. Tenía una superficie de, aproximadamente, 8.000 metros cuadrados y ha pasado a unos 15.000.
¿Los trabajos se ha desarrollado con normalidad o han encontrado algún inconveniente?
La intervención directa en la charca ha sido muy corta. Los trabajos se han desarrollado con normalidad y la actuación en lo que es la charca en sí ha sido de, aproximadamente, un mes. El resto ha consistido en realizar la oquedad paralela, levantar la altura de la playa y rehabilitar el acceso sur.
¿Temió en algún momento que la charca se estropeara durante los trabajos?
Siempre que se actúa sobre un espacio se tiene miedo a la alteración de las condiciones naturales. En este caso era una zona altamente sensible al ser paraje natural protegido, parque nacional, reserva de la biosfera y además sitio de incuestionable belleza paisajística. La ULPGC en colaboración con el Banco Español de Algas realizó un estudio previo bastante exhaustivo, se aislaron y se han mantenido en cultivo las principales cepas de fitoplancton (que le dan el color), se hizo un estudio de factores limitantes de crecimiento y un modelo teórico de respuesta de la charca en el caso de que fuera necesaria la restauración de las condiciones iniciales. Con esto podríamos recuperar la charca en el caso de que hubiera sido necesario. La empresa pública Tragsa ha realizado un trabajo magnífico, muy minucioso y siguiendo a rajatabla los condicionantes ambientales del proyecto. Hemos seguido estrictamente el Plan de Vigilancia Ambiental del proyecto que elaboró la Demarcación de Costas. Nuestro trabajo del Departamento de Biología de la ULPGC, conjunto con el Banco Español de Algas, también de la ULPGC, ha sido financiado por la Dirección General de Costas del Ministerio de Agricultura, Pesca y Medio Ambiente y Tragsa.
¿Cuánta arena del dragado se ha sacado al final?
No tengo la cantidad exacta, pero se han movido unos 40.000 metros cúbicos de arena.
¿Toda la arena extraída se ha depositado en la playa?
Sí, toda la arena se ha depositado en la playa. Al principio estaba programado sacar aproximadamente un tercio para la playa próxima, pero finalmente se decidió subir algo menos de un metro la altura de la playa sobre lo proyectado, con lo que no hizo falta mover arena fuera del espacio y, además, se aumentó la seguridad de la charca frente a los temporales.
¿Qué tipo de medidas se adoptarán a partir de ahora para evitar que se vuelva a reducir su tamaño?
No se pueden tomar medidas porque nunca estamos a salvo de un episodio natural que sobrepase la altura de la playa y vuelva a introducir arena en la charca, pero sí podemos decir que en condiciones normales e incluso en temporales la charca está protegida.
¿Los visitantes tendrán que guardar una distancia mínima para no acercarse al lago?
Creo que las medidas de visitas que tenía antes del dragado son suficientes, un cordón que permita la visita manteniendo a los visitantes alejados unos metros de la orilla de la charca. Pero eso es cuestión del Plan de Gestión.
Los Clicos ha mantenido el color verde tan característico.
El color verde es debido al fitoplancton y este hasta la actualidad se ha mantenido, a pesar del aumento de volumen y por lo tanto su dilución, la charca ha estabilizado rápidamente la concentración alcanzando en menos de dos semanas sus valores iniciales. Ahora habrá que esperar unos meses para ver si su situación sigue estable.
¿Y su salinidad?
La salinidad ha disminuido de 54 gramos por litro a 47 gramos por litro. Esto no es malo, pero puede ser efecto del invierno donde la evaporación es menor y la salinidad disminuye en la charca. Con el dragado se ha recuperado el pequeño movimiento de marea que tenía y esto es bueno porque facilita la renovación de agua aunque sea en pequeña cantidad.
¿Las algas del charco son endémicas de Lanzarote? ¿Ha influido en ellas la disminución de la superficie de la laguna?
En principio no, la especie principal está reseñada desde el año 1994 en charcas hipersalinas del Mediterráneo, pero no podemos descartar que sea una variedad autóctona, eso lo está estudiando el Banco Español de Algas que la mantiene en cultivo, pero es un trabajo muy difícil que requerirá la confirmación de especialistas externos.
¿Qué trabajos faltarían?
En relación con la parte física pienso que no quedan trabajos pendientes. En la parte biológica se llama Charca de Los Clicos porque en el fondo existía un bivalvo (clico) que por trabajos del siglo XIX creemos saber la especie, me gustaría poder reintroducir la especie. Pero esto es un trabajo difícil y en cierta manera arriesgado que necesita varios experimentos de laboratorio y de campo, ya que reintroducir un filtrador podría reducir el fitoplancton y por lo tanto el color verde, aunque existen testimonios de que la charca no era verde en los años 50. Para esto haría falta un proyecto de investigación de tres años que nos financiara el estudio y en las condiciones actuales no es fácil conseguir financiación para la investigación.
De las investigaciones que usted ha realizado, ¿cuál es la que más le ha llamado la atención?
La gran estabilidad del sistema. Nosotros empezamos a estudiar la charca en diciembre de 1994 con el objetivo del dragado, seguimos los años 96, 97 y 98 y volvimos del 2002 al 2007 y luego en 2015. Han sido muchos años y cientos de muestreos con miles de análisis y lo que más me ha impresionado es la gran estabilidad biológica del sistema, que se ha mantenido prácticamente inalterado. Y ahora se ha demostrado este gran equilibrio con la capacidad de recuperación, ya que en menos de dos semanas ha vuelto a los valores iniciales, pese a duplicar su volumen.
