Los miembros de la Orden del Cachorro Canario de Lanzarote cumplieron ayer con la tradición de enramar la Cruz del Siglo situada en el Islote del Francés y que rememora la entrada del siglo XX. "Desde hace seis años iniciamos el enramado de esta cruz para evitar que esta centenaria tradición se perdiera", señala el presidente de la Orden del Cachorro en Lanzarote, Fernando Petit.
Aunque es en Teguise donde está más arraigada esta tradición en Lanzarote, concretamente en el enramado de las 15 cruces que existen en el casco histórico de la que fuera la primera capital de la isla, en Arrecife sólo existe la cruz del Islote del Francés. "Me acuerdo que los militares de la Comandancia de Marina (edificio que está frente a la Cruz) siempren hacían una parada militar en esta zona coincidiendo con el Día de la Cruz cada tres de mayo", señala Julián Martín, uno de los componentes de la Orden del Cachorro.
La denominada Cruz del Siglo (que forma parte del Catálogo de Protección de Arrecife, en vigor desde el año 2013) fue un homenaje que se hizo a la ciudad por la entrada del siglo XX. Fue en 1900 cuando se colocó, aunque la original tuvo que se reparada después de que unos vándalos la destrozasen hace más de una década.
Al igual que el pasado año, la Orden del Cachorro eligió el color amarillo para adornar la cruz. Una tarea que comenzaron pasada las cinco de la tarde y que culminó casi dos horas después. "Hay que tener mucho cuidado porque estamos ante un bien patrimonial", recordaban ayer mientras colocaban con mucho mimo las flores y ramas verdes.
"El centro de la fiesta es una cruz, de tamaño natural o reducido, que se adorna, en la calle o en el interior de una casa, con flores, plantas, objetos diversos, pañuelos, colchas, cuadros, candelabros, etc. y adornos elaborados. A la hora de establecer los orígenes de esta celebración popular de la Cruz hay que referirse necesariamente a una serie de fiestas paganas que se celebraban desde muy antiguo en el mes de mayo", recordaban ayer desde la Orden del Cachorro en un intento de transmitir a las nuevas generaciones los símbolos de las islas.
En Teguise fueron los alumnos del colegio público y de la guardería municipal los que el pasado viernes adornaron algunas de las cruces para mantener viva esta tradición, aunque fue durante este largo puente cuando los vecinos y distintos colectivos del municipio han culminado de embellecer el casco histórico de flores.
