La nueva Ordenanza de Seguridad y Convivencia Ciudadana prevé multas de entre 100 y 3.000 euros dependiendo de las infracciones que se cometan, es decir, si son leves, graves o muy graves. El importe de los ingresos que se obtengan por las sanciones se destinará a mejorar el espacio urbano como lugar de encuentro y se podrán sustituir las multas por trabajos comunitarios.