La Provincia - Diario de Las Palmas

La Provincia - Diario de Las Palmas

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

Discos en el cielo de Playa Grande

Lanzarote acogió el pasado fin de semana el torneo de 'frisbee' con la participación de 24 equipos europeos

Discos en el cielo de Playa Grande

La alegría de marcar goles en el aire levantó el vuelo este fin de semana en la Playa Grande de Puerto del Carmen, en el municipio de Tías, en forma de frisbee o disco volador, elemento indispensable para la práctica del ultimate, deporte que reunió a 24 equipos europeos en el Torneo Internacional Beach Ultimate Coman Fruta Canaria (CFC) que desde hace 14 años organiza el conjunto lanzaroteño Mubidisk, actual campeón de España en división mixta de playa, en colaboración con el Ayuntamiento de Tías. Alberto Rodríguez es el presidente del club insular.

Se trata de un deporte muy minoritario pero que contagia de adrenalina a los jugadores sobre la arena de la playa, la modalidad del campeonato. También se puede jugar sobre césped. De los 22 miembros que forman el club lanzaroteño, 14 de ellos están en activo. La maternidad y el trabajo, sobre todo, impiden contar con todos los integrantes de Mubidisk de forma regular, aseguró ayer Nayra Vega, que lleva casi 15 años en esta práctica deportiva, aún fuera de los Juegos Olímpicos. En 1967 se creó la Asociación Internacional de Frisbee en Estados Unidos y el primer reglamento oficial, pero el juego comenzó varias décadas antes.

"Es un deporte que necesita de mucha técnica a la hora de realizar los lanzamientos y también requiere rapidez y visión de juego", explicó Nayra, grancanaria afincada en Lanzarote. Comenzó a jugar después de que un amigo y jugador, Alexis Rodríguez, lo introdujera en la isla conejera.

La falta de patrocinadores y de ayudas para los desplazamientos en las competiciones impide que el ultimate cuente con un calendario estable de torneos. En el Archipiélago solo se celebran tres o cuatro al año, indicaron Sergio Torres y Elvio Hernández, integrantes del equipo canario Electrobachata, a diferencia de la Península, "donde ha crecido exponencialmente en poco tiempo". Se trata de un deporte "muy de equipo en el que no puede existir un Cristiano Ronaldo", añadieron Sergio y Elvio.

En Portugal existen 200 jugadores y Sebastian Lacroix es uno de ellos. Forma parte del Bufa, que este domingo disputó la final contra el canario Salivuela. El Mubidisk llegó a semifinales. "En el equipo nos necesitamos todos y todos debemos esforzarnos", destacó el portugués.

Más de 350 jugadores de Holanda, Portugal, Suiza, Italia, Francia, Reino Unido, Alemania, Finlandia, Irlanda y España se dieron cita entre el viernes y el domingo en Playa Grande, una convocatoria que les ha servido para prepara el mundial que el próximo año se disputará en el país galo.

Sobre el arenal de Playa Grande se diseñaron cuatro campos de juego de 70 metros de largo por 25 metros de ancho cada uno en los que se disputaron los encuentros.

Compartir el artículo

stats