"Sentí un escalofrío cuando recibí la noticia". Yusdelsi Leal, que llegó hace apenas ocho meses a Lanzarote desde el municipio cubano de Camagüey no ocultaba ayer su dolor por la muerte de Fidel Castro. Yusdelsi se reunía junto a otro grupo de cubanos residentes en Lanzarote en la sede de la Asociación Cubano lanzaroteña ´Sal y Caña´ creada hace apenas un año y que está presidida por el lanzaroteño, Segundo Rodríguez.

"Con Cuba con Fidel y siempre". Este fue el mensaje que se le hacía llegar ayer a la embajada cubana en Las Palmas de Gran Canaria junto a un ramo de flores con los colores de la bandera cubana.

El respeto y la admiración hacia la figura de Fidel Castro es la tónica común de los miembros de la asociación que se dieron cita ayer en la sede de ´Sal y Caña´ en Arrecife. "Mi hermana que vive en Houston (EEUU) me despertó de madrugada para darme la noticia", comenta Yaneli Espinosa que reside en la isla desde hace cinco años. "Estamos agradecidos a lo que ha hecho por nosotros aunque ahora esté en Lanzarote para buscar un futuro mejor", resalta Espinosa que aclara que su salida de Cuba no tiene que ver con motivos políticos.

Carlos Alberto Díaz, que también es un recién llegado a Lanzarote, añade que como "hijo de la revolución" sintió "una enorme conmoción". Este economista asegura que "la gente humilde como yo pudo terminar una carrera en Cuba", aunque ahora es uno de los miles de cubanos que ha salido de su país "porque la situación económica está muy mal".

Roberto Peñalver, con 18 años de residencia en Lanzarote, también se sentía ayer "muy triste" por la pérdida de su comandante. Peñalver mostraba ayer su orgullo por haber trabajado durante diez años como profesor de educación física en el colegio de Belén en La Habana, en el que estudió Fidel Castro cuando tenía 16 años. "En el colegio se custodia un libro en el que un jesuita escribió que ese alumno iba a dirigir este país", relataba ayer a sus paisanos.

El presidente de la asociación ´Sal y Caña´ es el exconsejero socialista del Cabildo de Lanzarote, Segundo Rodríguez. "La asociación se preocupa básicamente de solucionar los problemas burocráticos y de adaptación de la comunidad cubana en la isla", afirma.

Sobre el futuro tras la muerte de Fidel, los cubanos conejeros no creen que vaya a ser muy diferenta a la situación actual. "Aunque a nosotros nos gustaría que hubiese un cambio a mejor tampoco queremos que desaparezcan los principios de la revolución cubana. Los cambios tenemos que hacerlos los cubanos y los que viven en la isla", asegura Olga Gómez.

"Yo quiero que la situación económica cambie", insiste Yusdelsi Leal. Y es que esta cubana sabe bien de lo que habla. "En Cuba la carne de vaca apenas se ve en las tiendas", confiesa Yusdelsi que todavía recuerda el primer día en el que fue al supermercado en Lanzarote. "Me quedé impresionada por toda la comida que había, era increíble".