Luis Ramírez González (1884-1950) está considerado como el gran mecenas de Lanzarote no sólo por la labor que desempeñó en vida a favor de la cultura en la isla y otras obras benéficas sino porque una parte de su fortuna fue a parar a la Congregación de Los Salesianos para instaurar ocho becas para los niños más necesitados de la isla. Los deseos de Don Luis, que no tuvo herederos directos, comenzaron a ejecutarse cuatro años después de su fallecimiento tras la venta de sus bienes hasta que las ayudas cayeron en el olvido a partir de los años 80 del pasado siglo.
El Ayuntamiento de San Bartolomé, municipio en el que nació Luis Ramírez, está liderando una iniciativa encaminada a restaurar estas becas que según el testamento deberían ir destinadas a dos niños de Arrecife, dos de Teguise y a uno de los municipios de Tinajo, Haría, Tías y San Bartolomé.
La alcaldesa de San Bartolomé, María Dolores Corujo, convocaba la semana pasada a los alcaldes, párrocos y jueces de paz de Arrecife, Haría, San Bartolomé, Teguise, Tías y Tinajo a una reunión informativa con el objetivo de crear un equipo de negociación con Los Salesianos para restablecer las ayudas.
Un testamento en el que se recogía la creación de becas para "los hijos más pobres, siendo preferidos los huérfanos y de mejor conducta, de la isla de Lanzarote. Seleccionados por una junta presidida por el párroco del lugar, e integrada por el alcalde y el juez de paz, y por mayoría de votos. En el Colegio Salesiano de Las Palmas, de manera tal, que, si los Salesianos desapareciesen de España, los niños podrían ser enviados a otros países según determinen los Salesianos".
Silvano Corujo Rodríguez, actual presidente de la asociación cultural "Majadas de Mina" y uno de los niños que se benefició de una de las becas entre los años 1963 y 1970, es uno de los lanzaroteños que ha iniciado la recuperación de estas becas.
"Para hacernos una idea, la venta de las propiedades de Don Luis, entre las que se encontraba la actual Casa de la Cultura de Arrecife y la Bodegas La Florida en San Bartolomé ascendió en el año 1954 a un millón y medio de pesetas, lo que equivaldría ahora a unos 10 millones de euros", destaca Silvano que ya ha mantenido los primeros contactos con Los Salesianos para instaurar las becas.
De hecho, Cristóbal López, Provincial de la Inspectoría Salesiana María Auxiliadora con sede en Sevilla trasladaba ayer la voluntad de su congregación de "honrar el compromiso asumido en su momento por quienes nos precedieron para otorgar becas perpetuas para la educación, en ambiente salesiano, de niños pobres y desfavorecidos de la isla de Lanzarote".
Los Salesianos reconocen desconocer los motivos por los que se dejaron de otorgar dichas ayudas. " Ahora estamos abiertos a dialogar con las juntas (párroco, alcalde y juez de paz) de los distintos lugares para ver en qué términos y condiciones se puede concretar el otorgamiento de las becas", afirma Cristóbal López que añade que "la Congregación ha presentado ya a los párrocos algunas propuestas que pueden servir de base para el diálogo correspondiente".
Silvano Corujo recuerda que las ayudas consistían en abonar los gastos de viaje en barco desde Lanzarote a Gran Canaria, así como la educación en régimen de internado de los estudios que se impartían en ese momento en Los Salesianos, que en su época era la formación profesional y el bachillerato. "A mí pagaron todo, hasta la ropa", recuerda Silvano.
Unas becas que según Silvano Corujo deberán adaptarse a las nuevas realidades educativas aunque siempre desde la óptica de esta congregación religiosa. Los Salesianos de Don Bosco (SDB) son una congregación religiosa perteneciente a la Iglesia Católica y fundada por San Juan Bosco el 18 de diciembre de 1859, en Turín.
En la acción directamente educativa, sus obras son muy diversas, pero predominan los oratorios y centros juveniles, las escuelas de diversos grados y los centros de formación profesional; también las casas de acogida para jóvenes en dificultad, universidades y centros de catequesis y pastoral. En Sevilla cuentan con el Colegio Mayor Universitario San Juan Bosco y en Barcelona la Escuela Universitaria de Ingeniería.
Los municipios se han dado de plazo un mes para constituir una junta encargada de seleccionar a los alumnos. Posteriormente, se volverá a convocar otra reunión en San Bartolomé de la que saldrá el grupo coordinador encargado de negociar con los Salesianos esta nueva fase de las becas. El objetivo es que las ayudas escolares puedan empezar a aplicarse el próximo curso.
Ramírez, que fue juez de paz, consejero del Cabildo y alcalde de San Bartolomé durante un año, fue nombrado 1913 caballero de la Orden Civil del Mérito Agrícola por su Majestad Alfonso XIII por su labor por la reforestación de la isla.
