La consejera de Educación y Universidades del Gobierno de Canarias, Soledad Monzón, firmó ayer, junto al presidente de la Asociación de personas con Discapacidad de Lanzarote (Adislan), Pablo Yebra Betancor, un convenio de colaboración para establecer vías de colaboración y reforzar la atención educativa al alumnado no universitario con Necesidades Específicas de Apoyo Educativo derivadas de la discapacidad, en Lanzarote.

El convenio establece la cooperación entre ambas instituciones para diseñar actividades de formación para profesorado, familias, personal de servicios complementarios y profesionales del departamento de orientación y para elaborar y difundir materiales de apoyo para docentes y familiares con el objeto de mejorar la atención al alumnado con discapacidad.

Además, permitirá a los centros educativos contar con personal voluntario de Adislan como refuerzo para la atención del alumnado con Necesidades Específicas de Apoyo Educativo, para acompañar actividades educativas y apoyar la labor docente. El voluntariado funcionará siempre bajo la condición de colaboración y en presencia del docente del aula, profesorado de apoyo o del orientador o orientadora del centro educativo.

Lanzarote cuenta con 12 aulas enclave y un Centro de Educación Especial para atender al alumnado con Necesidades Específicas de Apoyo Educativo. En total, hay registrados 104 alumnos y alumnas con Necesidades Educativas Específicas, de los que 68 son estudiantes con discapacidad, 21 presentan algún trastorno generalizado del desarrollo y 15 manifiestan dificultades específicas en el aprendizaje.