La Provincia - Diario de Las Palmas

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El palmeral ya tiene quien lo mime

Una brigada de Gesplan se encarga del cuidado de estas plantas, algunas centenarias, de Haría

Un operario en plena faena de limpieza de una palmera. D. R.

Marcial Méndez, Chalo como lo conocen en Haría, lleva el cuidado de las palmeras en la sangre. No en vano, su abuelo y sus tíos fueron podadores artesanos cuando a las palmeras, muchas de ellas, de más de 15 metros se subía descalzo trepando sobre el tronco y con un hacha para la tala. Chalo es ahora el capataz de la cuadrilla de podadores de la empresa pública Gesplán que se encargará, a través de una encomienda del Cabildo de Lanzarote y el Ayuntamiento de Haría, al mantenimiento del palmeral norteño y a evitar que los miles de ejemplares repartidos por el municipio pueda verse afectada por una plaga, especialmente, por la letal diocalandra.

El abandono del campo ha sido una de las principales causas que ha contribuido a que muchas palmeras estén en la actualidad en un mal estado de conservación aunque por fortuna, libre de las plagas que han acabado con miles de estas plantas en Canarias.

"Lo primero que hacemos es sanear a la palmera y limpiar los alrededores de malas hierbas", señala Chalo. En muchas ocasiones las hojas secas que se retiran se utilizan como compost una vez trituradas mecánicamente. La primera fase del proyecto se está llevando a cabo en las márgenes de carreteras y caminos para evitar que las ramas puedan caer sobre las personas o vehículos.

Después del tratamiento de cada palmera los operarios proceden a la limpieza con agua y lejía de todo el material utilizado para desinfectarlo ya que de esta manera se asegura que pueda contagiarse a una planta sana en caso de una posible enfermedad. Sólo en el caso de que las palmeras están situadas en los bordes de una calzada o un lugar transitado por personas se les retira la primera capa de hojas verdes. En ese caso se aplica un sellante (suele ser pintura) en el corte para prevenir la diocalandra.

La campaña, que comenzó en abril, se prolongará durante un año, aunque el Ayuntamiento pretende mantener esta iniciativa por ser de vital importancia.

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