El maestro carpintero Manuel Perdomo Cabrera (Haría, 1942) y el atleta paralímpico Lionel Morales González (Caracas, 1973) recibieron el sábado el homenaje del municipio norteño, que reconoció sus trayectorias con los Premios Haría 2017 en las fiestas de San Juan.

Perdomo destaca por su recuperación del patrimonio mobiliario relacionado con el sector primario y el rescate de los antiguos talleres de Haría (carpintería, herrería, entre otros), mientras que Morales cuenta con una magnífica trayectoria deportiva y de superación personal, que lo han convertido en un ejemplo y referente para muchas personas. Asimismo, se homenajeó al Haría Club de Fútbol, que tras una larga temporada logró el ascenso a Tercera División después de disputar la eliminatoria con el equipo palmero Unión Deportiva Los LLanos.

La Banda Municipal de Pájara, de Fuerteventura, abrió el acto, celebrado en el auditorio de Jameos del Agua. El alcalde norteño, Marci Acuña, así como diversos miembros de la corporación y el presidente del Cabildo, Pedro San Ginés, fueron algunas de las autoridades que acudieron a la gala.

Perdomo pasó su infancia y juventud en Haría, donde despertó su pasión por los trabajos artesanales de mano de su padre. A los 19 años se trasladó a Las Palmas de Gran Canaria para trabajar en la carpintería Taller González Trujillo, donde permaneció dos años. Compaginó su trabajo con el de operador en el cine Astoria, gracias a su labor como operador en el cine parroquial de Haría. En Gran Canaria, se ocupó de las siete salas de Jesús Rodríguez Doreste, que lo contrató como encargado de la restauración y decoración.

En 1971 regresó con su familia a Lanzarote al ser destinada su mujer a la escuela unitaria de Arrieta y en 1973 montó su propio taller en Haría. En 1975 inició el taller de torneado de madera, donde se dedicó en exclusiva a realizar esa labor para los carpinteros de la Isla y al montaje de balcones y pasamanos de escaleras. En 1979 fue concejal de Obras del Ayuntamiento norteño, con Juan Santana de alcalde. Ejerció también la docencia como maestro de carpintería en la Escuela Taller de Haría,entre 1997 y 2001, dedicada a la restauración del Museo Sacro, donde se jubiló como carpintero y comenzó a recuperar los talleres artesanales.

La historia de un campeón

El atleta Lionel Morales se trasladó con cinco años a vivir a Lanzarote tras residir en Venezuela. A los doce la familia se estableció en Punta Mujeres. Su madre, María Dolores González, es originaria del municipio de Haría. Tras trabajar como camarero en 1991 se incorporó a la plantilla del Cabildo Insular.

Desde pequeño practicaba surf, pesca submarina, skate y boxeo. En 1991, con apenas 18 años fue subcampeón de España de Boxeo en la categoría Junior, gracias a la preparación recibida en la Escuela de Boxeo Palenke. El boxeo le aportó la constancia, el espíritu de sacrificio y el tesón, claves para su desarrollo personal y deportivo.

En enero de 1997, tras sufrir un accidente de moto perdió la mitad de su pierna izquierda. Varios meses de hospitalización mermaron considerablemente sus condiciones físicas. A partir de ese momento introdujo en su vida el submarinismo, la natación, el atletismo y el ciclismo. En su extenso palmarés están los campeonatos de España y del Mundo de Duatlón. En 2016 octuvo un diploma paralímpico por su séptimo puesto en los Juegos Paralímpicos de Río.