La cuarta edición del Concierto en Vela "Homenaje al hombre del mar" no dejó indiferente a nadie. El entorno idílico que siempre es la ribera del Charco de San Ginés, una orquesta de primer nivel, un programa popular y reconocible, un público fiel y entregado, una cuidada iluminación, un sonido a la altura del evento y unas cuantas sorpresas inesperadas dieron vida a una noche inolvidable alrededor de la que es, por derecho propio, "la iniciativa turístico-cultural más importante del verano capitalino".

El patio de butacas al aire libre en el que se convierte la ribera del Charco presentaba un aspecto inmejorable cuando aún faltaba más de media hora para alcanzar las diez de la noche, hora fijada para el comienzo del evento. A esa hora, el presentador del acto, Francisco José Navarro, daba la bienvenida al público y daba paso a dos horas de cine que abrían los siempre impresionantes acordes de la Marcha imperial de la banda sonora de La Guerra de las Galaxias.

John Williams, Ennio Morricone, Hans Zimmer, Nicola Piovani o John Barry, entre otros, o mejor, sus inmortales composiciones, fueron sonando a lo largo de la noche para hacer disfrutar a un público entregado desde el primer minuto y que, por momentos, podía sumergirse en algunas de las películas más legendarias de la historia del cine gracias a la proyección de escenas sobre dos grandes globos situados en las proximidades del escenario.

Por unas horas, el Charco de San Ginés se convirtió en un inmenso auditorio al aire libre en el que se pudieron escuchar bandas sonoras legendarias, iconos de distintas generaciones, como son las de El Mago de Oz, La Misión, Lo que el viento se llevó, La vida es bella, La lista de Schindler, Parque Jurásico, Tiburón y Piratas del Caribe, entre otras. Mientras, sobre la lámina de agua del Charco de San Ginés, piragüistas y jolateros daban vida a distintas performances relacionadas con el concierto. Una de las más llamativas, sin duda, fue la que acompañó a la interpretación que hizo la Orquesta Clásica de Lanzarote del Water Music, de Häendel, composición que cumple 300 años. Los fuegos artificiales daban luz y color al espacio.

Hubo, además, un momento dedicado especialmente a los más pequeños, que disfrutaron con los acordes de El Rey León, La Sirenita, El libro de la Selva y La Bella y la Bestia.

La Orquesta Clásica de Lanzarote, dirigida en esta ocasión por José María Vicente; el Coro Escolar del CEIP Antonio Zerolo, dirigido por Merche Arcas y Regla Santana, y los solistas Judith Pezoa, Besay Pérez, Esther Alfonso y Beni Ferrer, sorprendieron al público con una puesta en escena dinámica, novedosa y atrevida en lo que fue, sin duda, un nuevo éxito para un evento que lució, por vez primera, su condición de "Distinguido del Turismo 2016".

A la conclusión del evento, el concejal de Turismo del Ayuntamiento de Arrecife, Rafael Juan González, quiso agradecer la labor de la Orquesta Clásica de Lanzarote, "que se supera cada año", el respaldo del público "a un proyecto que se ha convertido en una valiosa herramienta de promoción de los valores culturales, paisajísticos y turísticos de Arrecife", y el esfuerzo e implicación de "quienes han contribuido a hacer realidad una iniciativa a la altura de la tercera capital de Canarias".

El Concierto en Vela-Homenaje al hombre del mar es una iniciativa organizada por la Orquesta Clásica de Lanzarote, con la colaboración de Turismo Arrecife, Turismo Lanzarote y la consejería de Turismo del Gobierno de Canarias.