Las carabelas portuguesas (Physalia physalis), denominadas también falsas medusas por su parecido con las reales, han incrementado su presencia en los últimos días en las playas de La Graciosa, menos en Playa Francesa, por lo que el Consorcio de Seguridad y Emergencias ha recomendado hoy de nuevo, tras hacerlo el pasado viernes, evitar el baño en el litoral de la octava isla. El ente habla de “gran cantidad” de esta especie cuya picadura es dolorosa y puede provocar graves lesiones si no se evita su contacto con ellas.

En una batida por La Graciosa el personal de Emergencias de Lanzarote (Emerlan) contabilizó esta mañana alrededor de una quincena de carabelas portuguesas varadas en Las Conchas, en el noroeste de la Isla en los últimos días, y en la Baja del Ganado (hacia el sur), zona que atrae a los surferos, unas veinte, indicaron fuentes de la ONG. El viernes se hallaron algunos ejemplares cerca del teleclub, en Caleta de Sebo, añaden desde Emerlan. El pasado jueves un varón fue atendido por una picadura cerca del teleclub.

Las corrientes del sur y suroeste de los últimos días han propiciado la llegada de carabelas portuguesas hastas las costas gracioseras. Conocidas también como botella azul, se trata en realidad de un organismo colonial cuyos individuos se especializan para mantener viva la colonia. La agrupación de hidroides se divide el trabajo y, de ese modo, los gastrozoides se encargan de la digestión, los dactilozoides de detectar y capturar las presas y de la defensa, los gonozoides de la reproducción, mientras que el neumatóforo es la parte que flota o vela.

Fuentes de la Reserva Marina de La Graciosa, explicaron que, a parte de que ahora es la época, “en general, las medusas tienen un boom reproductivo y también, en términos generales hay una tendencia en los océanos a aumentar la presencia de medusas por el desequilibrio y la contaminación ambiental”.

De persistir las corrientes del sur y suroeste y la llegada de nuevas medusas el problema se agravaría teniendo en cuenta que la Semana Santa está a la vuelta de la esquina. Aunque de forma oficial arrancará el 26 de marzo, mucha gente se desplaza a La Graciosa el fin de semana anterior. No obstante, el grueso mayor de visitantes se prevé a partir del Jueves Santo, 30 de marzo, cuando la población de La Graciosa podría llegar a triplicarse hasta alcanzar las 2.000 personas o incluso más.