Un centenar de profesionales del volante de la capital grancanaria pertenecientes en su mayoría al sector del taxi y camioneros denuncian el malestar que entre los usuarios de este tipo de transporte público están provocando los numerosos ´guardias muertos´ instalados en distintas zonas de la ciudad y, especialmente, en sus barrios periféricos. En este sentido, aclaran que la proliferación de este tipo de dispositivos colocados en la vía se produjo durante los dos últimos meses del mandato de la anterior corporación capitalina, liderada por Josefa Luzardo.

Tanto los trabajadores del taxi como los camioneros presentaron, el pasado 27 de agosto, un escrito al concejal del Área de Seguridad y Movilidad Ciudadana, Jesús González Umpiérrez, expresándole que los ochenta dispositivos de barreras instaladas sobre la vía pública para reducir la velocidad de los automovilistas en determinados puntos de la capital están ocasionando problemas de salud entre los usuarios del taxi, pacientes trasladados en ambulancias, profesionales del transporte, motoristas y automovilistas en general.

Los afectados alegan que los conocidos como ´guardias muertos´, cuya instalación ha proliferado en el último año, principalmente en los barrios de la zona alta de la ciudad y cono sur, están generando lesiones o enfermedades profesionales a aquellos conductores que se ven obligados a circular a diario por las zonas afectadas.

Entre los problemas de salud se refieren a dolores de espalda, cuello, molestias a pacientes trasladados en ambulancias, a recién intervenidos quirúrgicamente y severas molestias a aquellos trabajadores que padecen de inflamación de la próstata.

Concretamente, los taxistas son los que más quejas reciben por parte de sus clientes. Mientras que los afectados también se refieren al peligroso traslado de la carga que se observa en los camiones tipo container de gran tonelaje cuando se ven obligados a superar el obstáculo sobre la vía de varios de estos dispositivos.

Los denunciantes también argumentan que los servicios de emergencias, como bomberos y ambulancias, también padecen un grave contratiempo a la hora de realizar sus servicios, "puesto que no pueden circular a la velocidad necesaria por el impedimento de las barreras y, consecuentemente, la demora en la urgencia, así como las molestias ocasionadas al paciente trasladado".

Los afectados apuntan la inexistencia de señalizaciones verticales que indiquen al automovilista, con la suficiente antelación, la proximidad de los ´guardias muertos´. También plantean al concejal de Tráfico la necesidad de suprimir los ´guardias muertos´ y medidas más efectivas en la reducción de la velocidad por las vías urbanas y menos lesivas con la salud de las personas.