Cerca de 1.500 profesores interinos y sustitutos que habían sido contratados en cursos anteriores se quedarán sin trabajo este año. Así lo denunciaron ayer los representantes de STEC-IC que aseguraron que se trata del "mayor" Expediente de Regulación de Empleo (ERE) del Archipiélago.

El sindicato, que representa a la mayoría de los docentes de la provincia de Las Palmas, manifestó que la Consejería de Educación persigue exclusivamente "reducir gastos" sin contar con que estos recortes repercutirán negativamente en la calidad de la enseñanza que reciban los alumnos. "Este curso arranca de manera caótica. Es un curso donde han primado la improvisación y los graves recortes económicos. Comenzar las clases no es abrir las puertas de los centros como si fuera un garaje", señaló Silvia Rodríguez Court, representante del STEC-IC.

Además de las "irregularidades" en los nombramientos de interinos y sustitutos, el STEC-IC recuerda la "reducción" de 60 ciclos de Formación Profesional (FP) tras la reforma llevada a cabo por el Gobierno de Canarias. "Son ciclos que tienen demanda", señala Fernando Pellicer, miembro del STEC-IC, que dice que es "mentira" que existan 11.000 plazas libres en FP, como ha anunciado la Consejería.

Por otra parte, Pellicer adelantó que el sindicato recurrirá el decreto aprobado en el pasado agosto por el Gobierno de Canarias a través del que se le da mayor autoridad al equipo directivo en "detrimento" de la figura del consejo escolar o del claustro de profesores. "El Gobierno de Canarias apuesta por una jerarquización frente a una idea de trabajo democrático. Convierte a los directores en policías de la Administración", dijo Pellicer, que aseguró que la "inmensa mayoría" de los directores está en contra de este decreto.