El responsable de Economía y Hacienda del Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria, Benito Cabrera, defendió la subida de impuestos a aprobar hoy por el Pleno, que dijo no perjudicará a los ciudadanos de menor renta y sólo supondrá un gasto de 60 euros más anuales por familia de media.

Con sus afirmaciones, el director de gobierno de dicha área del Ayuntamiento salió al paso de las del único partido de la oposición municipal, el PP, que ha asegurado que cada familia de la ciudad, como media, deberá afrontar una subida de entre 300 y 500 euros en sus gastos en 2010 a consecuencia de la referida revisión impositiva.

Antes del inicio de una sesión ordinaria del Pleno a la que se llevó para su aprobación la medida promovida por el grupo de gobierno, integrado por el PSC-PSOE, con mayoría absoluta, y su socio Compromiso, Cabrera respondió a unas acusaciones que momentos antes había repetido la portavoz del PP, Josefa Luzardo. La ex alcaldesa insistió en sus críticas a una subida tributaria que volvió a tildar de "atraco injustificado" en tiempos de crisis, asegurando, como ya hiciera, que elevará en la ciudad a 1.300 euros por familia el aumento impositivo medio que los españoles afrontarán en 2010.

Mientras, la portavoz de Compromiso en el Consistorio municipal y concejala de Fomento, Nardy Barrios, acusó al Gobierno de Canarias durante su exposición en el Pleno de hoy de forzar a la institución municipal a subir los impuestos, ya que según explicó, los 46 millones de euros por costes de capitalidad no transferidos eran la única opción del equipo de gobierno para no modificar las ordenanzas fiscales.

Barrios justificó este aumento impositivo por la necesidad de mantener los servicios públicos esenciales de la ciudad en "el peor momento de crisis que ha atravesado el Ayuntamiento", como el alumbrado público, del que dijo que en este momento no existen recursos para afrontar su pago hasta final de año.

La portavoz de Compromiso reconoció un "déficit de comunicación" por parte del grupo de gobierno a la hora de explicar estas modificaciones, ya que "parecía que se quería ver cómo podíamos solventar esta situación y no subir los impuestos".

Barrios acusó al Partido Popular (PP) de no haber exigido durante su mandato el pago de los costes de capitalidad desde el año 1996, algo que de haber ocurrido "podía haber puesto al Ayuntamiento en este momento en otras circunstancias", dijo.