El Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria desplegará esta noche por las calles de Vegueta a una sección del Grupo Operativo de Intervención y Ayuda (GOIA) que forman ocho agentes para evitar cualquier amago de botellón improvisado tras decretarse la suspensión de la romería de El Rosario por el riesgo de las obras en Vegueta.
Según datos que manejan los sindicatos policiales, este grupo del GOIA podrá reforzarse en caso de una emergencia con el resto de la unidad, 25 agentes más, que deben permanecer en alerta en sus casas. El resto de la presencia policial en la zona se reducirá al operativo habitual de la Unidad Nocturna que conforman una quincena de policías aunque estos deben de repartirse todas las calles de la ciudad.
Un portavoz de la Unión Sindical de Policía (USP) denunció ayer que el "despliegue especial" al que aludió hace unos días el concejal de Seguridad Ciudadana, Jesús González Dumpiérrez, no se ha concretado en la práctica porque los agentes llevan meses negándose a hacer horas extra los fines de semana porque el Ayuntamiento lleva más de un año sin abonarlas. Según dicho portavoz, en caso de emergencia los 25 GOIAs que deben ser movilizados tardarían casi dos horas en llegar al lugar en el que se les necesita, lo que resta mucha operatividad al despliegue. USP aseguró que, aunque no se prevén altercados, el Ayuntamiento ha actuado negligentemente.
