Trabajadoras de una fundación de UGT en Canarias, que ha entrado en quiebra, se han fotografiado para denunciar que el sindicato las despoja "de todo" después de estar cuatro meses sin cobrar los sueldos y haber contraído una deuda de 9 millones de euros.

María del Carmen Chico, una de las empleadas afectadas por la quiebra de la Fundación Canaria para el Desarrollo Social (Fundescan), dijo a Efe que la idea de posar desnudas se les ocurrió en la asamblea celebrada tras el encierro que mantuvieron los trabajadores en la sede de UGT en Santa Cruz de Tenerife.

Las imágenes fueron realizadas el lunes por la hermana de María del Carmen Chico, que es fotógrafa, a coste "cero", y la intención "no es nada sexual" sino que refleja "cómo nos sentimos: despojadas de todo", explica.

"Estamos dispuestas a todo porque queremos que esto se sepa a nivel nacional ya que es escandaloso se mire por donde se mire, y si nos tenemos que desnudar para que en la Península se sepa cómo están los servicios sociales en Canarias, lo hacemos", añade.

Asimismo los afectados por la quiebra de Fundescan recuerdan que en este organismo hay 160 trabajadores, y los 9 millones de euros de duda es "dinero público".

Fundescan prestaba servicios de orientación laboral para desempleados, cursos de formación profesional, cooperación internacional y gestionaba dos casas de acogida para víctimas de violencia machista con capacidad para quince unidades familiares.