| Mar de fondo. La Agencia Estatal de Meteorología anunció el lunes 14 de febrero para la mayor parte de esa semana una alerta naranja por fenómenos costeros adversos. Se advertía de la existencia de olas de hasta cinco metros en el litoral norte de Gran Canaria, afectando a la playa de Las Canteras. Las incidencias se iniciaron a partir del martes por la noche de forma intermitente y el Ayuntamiento prohibió el baño, siguiendo la ordenanza municipal de Playas, cuando se izara la bandera roja.

| Mareas vivas. A partir del jueves 17 la situación se agravó con la luna llena, provocando lo que se llama mareas vivas, esto es, cuando las olas mayores alcanzan más altura y las menores, menos altura. Entonces se produjeron rebosos en toda la playa, inundando las zonas de hamacas a pesar de que la Concejalía había dispuesto las precauciones de protección necesaria con montículos de arena. Ya el viernes 18 concluyó la situación adversa, pero empezaron las consecuencias con el arrastre de la arena y la aparición de piedras.