La directora general de Ordenación, Innovación y Promoción Educativa, Georgina Molina Jorge, defendió ayer las aulas mezcla y aseguró que los niños que comparten aula con escolares de distinto curso tienen un rendimiento académico igual o mejor que si estudiaran en un aula con compañeros del mismo nivel. "Es rentable pedagógicamente, se trabaja más cómodo y los alumnos se ayudan entre sí como en la vida cotidiana", indicó

Georgina Molina, que hizo estas declaraciones en relación a la protesta de un grupo de madres del colegio de Infantil y Primaria Federico García Lorca por la creación de un aula mezcla con niños de 5º y 6º de Primaria; y de la que informó ayer este periódico, señaló que la Consejería está aún recopilando datos de los centros académicos por lo que no podía concretar cuántos grupos de estas características existirán en este curso escolar a pesar de que los centros hicieron las previsiones en el mes de mayo.

El Ministerio de Educación en su informe anual sobre la educación en España señala que durante el curso 2009/10 hubo en Canarias 131 aulas mixtas de Primaria frente a las más de 5.271 unidades escolares.

La directora general de Ordenación, Innovación y Promoción Educativa insistió en que los grupos mixtos no se forman para ahorrar costes de personal tal como han denunciado sindicatos y familias sino para "optimizar los recursos educativos" que hay teniendo en cuenta la situación de crisis económica por la que está atravesando la comunidad autónoma.

Georgina Molina negó también que las ratios de este tipo de aulas fuesen elevadas tal y como critican los profesionales de la educación en Canarias.

El número de niños que conforman un aula de estas características va en función de los ciclos que se mezclan, los cursos así como si hay niños de Necesidades Educativas Específicas, en concreto que presenten un déficit en la adaptación curricular.

Añadió que las protestas de los padres quizá se debieran a que no estaban correctamente informados sobre este tipo de aulas, en qué consisten y cómo se trabaja con los alumnos.

Molina indicó que no hay motivo pedagógico para que los padres reclamen porque los resultados académicos de los niños que están en estas aulas "no empeoran".

La responsable de Ordenación afirmó que en la etapa Primaria las programaciones de los escolares se suceden a lo largo de los seis cursos en que esta dividida esta etapa educativa obligatoria que discurre entre los seis y los doce años por lo que los padres no deben temer el que niños de distinto curso estén en una misma aula.

"No se trata de trabajar con los de tercero y luego con los de cuarto curso, por poner un ejemplo. Sino trabajar un tema y organizarlo para que cada alumno trabaje en su nivel", concretó.

La nueva directora general, que confesó que Educación estudia incrementar la formación a los docentes que imparten clase en este tipo aulas, señaló que en muchos países europeos como Finlandia o comunidades autónomas como el País Vasco las aulas mixtas son una fórmula de trabajo que se incrementa cada curso.