- Vuelve usted a la política cuando parecía condenada después de negarse a dejar el Congreso el día en que se lo pidió el partido, hace dos años. ¿Se lo debe usted a Juan José Cardona o es que José Manuel Soria fue indulgente?

- No es volver, yo nunca me he marchado. Lo que hice en su momento fue desde el minuto uno explicarle lo que pasaba a mi partido. Nunca he tenido un problema con Soria. Fue Juan José Cardona el que se pone en contacto conmigo, pero Soria estaba desde el principio de acuerdo en que fuera en la lista.

- En aquel momento compañeros suyos de partido le criticaban que quería seguir de diputada en lugar de mantener su puesto de consejera del Cabildo para garantizarse una buena pensión. ¿Qué tiene que decir a eso?

- Es legítimo que cada uno piense lo que quiere, pero hay mucho desconocimiento. En el Senado y en el Congreso hay unas reglas muy claras y todo el mundo sabe que lleves el tiempo que lleves, hasta tu jubilación no puedes percibir una prestación, y en mi mente no estaba la jubilación. Yo hice en todo momento lo que quiere mi partido.

- Usted se ha caracterizado siempre por ser una política independiente. Tuvo sus problemas con la alcaldesa Pepa Luzardo y eso le obligó a dejar el Ayuntamiento. ¿Qué ocurrió en aquel momento?

- En aquel momento, y usted seguía la vida municipal, se habló de que había dificultades entre ella y yo, pero no era así. Yo había salido senadora y la alcaldesa me encargó coordinar las juntas de distrito, elaborar un reglamento y ponerlas en marcha, que eran nueve y no cinco como ahora. Fue una decisión personal dejar el Ayuntamiento y dedicarme al Senado porque había personas que habían apostado por mí en aquel momento. Recuerdo que eran los tiempos del fenómeno de la inmigración, un trabajo muy intenso. No hubo distanciamiento con ella.

- Regresa al Ayuntamiento con responsabilidades de gestión directa con los vecinos, como en su época con Soria de alcalde. Su primera encomienda importante, a partir del 1 de noviembre, será responder casi personalmente las quejas vecinales. ¿Cómo lo hará?

- Está clarísimo el compromiso de este gobierno con los ciudadanos, darles respuesta directa a través del registro de las concejalías de distrito. La mayoría de los escritos que llegan a ellas tienen que ver con certificados de empadronamiento, luego hay un porcentaje alto de escritos de las asociaciones de vecinos, que llevarán su propia seguimiento y dinámica a través de los concejales de distrito, ya con un contacto directo. Y después está el vecino individual, que es al que vamos a atender de inmediato. Por ejemplo, si un vecino me pide que se limpie el parterre de una calle de su barrio, lo que hacemos nosotros es consultar la programación de la contrata de Parques y Jardines, algo que ya hemos pedido, por lo que la respuesta será inmediata, en 72 horas.

- Esta corporación dice dar mucha importancia a los concejales de distrito, pero el alcalde ha elegido a políticos noveles como responsables. ¿No es eso una contradicción?

- Lo que ha dicho el alcalde, lo primero que nos propuso, fue dar prioridad absoluta a los concejales de distrito, y mi empeño es que ellos nos marquen la tarea. Se ha buscado una coordinadora que haga de enlace, que en este caso soy yo, que aporto mi experiencia.

- O sea que su experiencia compensa la bisoñez de los concejales de distrito.

- Yo no hablaría de bisoñez, sino de gente joven con una ilusión y unas ganas en su acercamiento a los ciudadanos que abre una nueva etapa política en la ciudad. Pero el gobierno tiene mucho equilibrio, combinando perfiles muy técnicos, como el de Agustín Gutiérrez, con personas más veteranas, como el alcalde o como yo; o políticos que ya son una realidad, caso de Ángel Sabroso.

- Lleva usted el área de Limpieza, pero su primer problema no han sido las calles sucias, sino que la nueva gerente es cuñada del alcalde. ¿Cristina Padilla es la concejal de Limpieza en la sombra para que usted pueda dedicarse a los barrios?

- Creo que el que haya una gerente en Limpieza, como ha ocurrido siempre, no significa que haya concejales en la sombra. La experiencia de Cristina Reyes nos permite hacer un trabajo conjunto, y en cuatro meses hemos presentado cuatro proyectos en la ciudad, en Santa Catalina y en San Telmo, la eliminación de cartelería y pintadas, que nos ha permitido retirar 3.000 cartelitos y más de 250 pintadas; otro plan en San Telmo, Triana, calles adyacentes y Primero de Mayo, y el de puesta a punto, para trasladarse a los barrios. Y eso se hace con un equipo muy coordinado internamente y gracias al trabajo de una concejal responsable y de una gerente que está dando los frutos de todo este trabajo.

- ¿Por qué siendo tan importante la relación con los vecinos se elimina del área de Limpieza el servicio de las redes sociales, que permitía a los ciudadanos conocer las campañas municipales o realizar denuncias directas a través de Twitter o Facebook?

- No se ha quitado, pero sí queremos mejorarlo. Queremos crear una dinámica que no sea una persona y un ordenador, un sistema que no tenía las mejores condiciones. El responsable de ese servicio me pone sobre la mesa que no podía responder de manera coordinada y en red a las respuestas de los ciudadanos. Y yo estuve de acuerdo con él. Lo primero que hice cuando llegué a Limpieza fue una reunión de coordinación, y por ejemplo me di cuenta de que había jefes de servicio que ni siquiera habían tenido un contacto entre ellos mismos. Queremos que los ciudadanos conozcan qué hacemos y por eso se está trabajando para ver con qué contamos. Se va a restablecer el servicio de Twitter y Facebook, pero no nos marcamos tiempo todavía; no se trata de quedar bien.

- Es usted responsable del área de Jardines ¿Por qué parecen abandonados algunos sectores, como la mediana de la avenida marítima? ¿No está demasiado encima de la contrata?

- La mediana le corresponde al Cabildo, pero es verdad que en el área de Parques y Jardines teníamos un problema con la última adjudicataria, que cuando sólo le quedaban julio y agosto para terminar el contrato se encuentra con un conflicto laboral y hace dejación. A partir del 1 de septiembre se hace cargo la nueva empresa y se está solucionando.

- ¿Y cuáles son los problemas más graves a resolver?

- Uno de los problemas más graves es la mosca blanca, y ahí tenemos que hablar con el Gobierno y el Cabildo para aplicar productos fitosanitarios y lavados de plantas con agua y jabón. Se hizo un plan de choque en Las Canteras y se hará una nueva programación. Afortunadamente no hay repercusión sobre la planta, pero afecta a los ciudadanos porque entra en las casas.

- ¿Cómo es la situación del resto de plagas?

- El picudo rojo está ya controlado, aunque hay alguna palmera que ha caído y se ha retirado, cortando a ras de suelo el alcorque, tapiándolo y cerrándolo durante dos años para que no haya contagio.

- ¿Va a haber nuevos parques?

- Nuevos parques no, pero sí vamos a delimitarlos para crear zonas de perros. La primera será en Las Rehoyas, una zona acotada, con riesgo por aspersión para filtrar los orines, y una zona de juegos.