La Asociación de Empresarios, Constructores y Promotores de la provincia de Las Palmas (AECP) ha propuesto al Ayuntamiento de la capital grancanaria financiar con más de 100 millones de euros parte de la reconstrucción de las 2.000 viviendas del Patronato Francisco Franco de Las Rehoyas, a cambio de concesiones de servicios o de la cesión de otras casas en la zona. Los constructores apuntan que las familias pueden ser realojadas en alquiler, mientras se reconstruye el barrio, en el stock de casas vacías que los promotores no han podido vender debido a la crisis.

La presidenta de los constructores, María Salud Gil, salió ayer al paso con este ofrecimiento a las declaraciones realizadas la pasada semana por la teniente de alcalde y concejala de Urbanismo, María del Carmen Hernández Bento, en la que cifraba en unos 400 millones el coste de tirar y levantar de nuevo las viejas casas de Las Rehoyas, pero planteó la dificultad de llevar a cabo la rehabilitación integral del barrio por la falta de financiación económica.

María Salud Gil sostuvo que los constructores están interesados en participar en dicha rehabilitación, "aportando la parte de financiación que le tocaría al Ayuntamiento. Si éste declara la zona como área de rehabilitación integral, el Estado y el Gobierno canario tendrían que aportar" su porcentaje de financiación que, en la reposición de El Polvorín por ejemplo, fue de un 60%. Gil recordó que ya ofreció hace unos meses al Ayuntamiento la firma de un convenio para regenerar zonas de la ciudad, como el Puerto, e insistió en mostrarle su disposición para hacer lo mismo con Las Rehoyas. A cambio de aportar parte de la financiación que necesita el Ayuntamiento para sacar adelante el proyecto, los promotores quieren gestionar todos los servicios del área que será rehabilitada, como limpieza, parques y jardines, ayuda a domicilio y "una serie de concesiones que se concretarían" una vez que se llevara a cabo el proyecto. "La tasa de retorno sería gestionar esa zona como si fuera un área de gestión autónoma", señaló.

Además del "derecho a superficie", también plantean que otra forma de sacar rentabilidad al proyecto sería realizar edificios de diez plantas, en lugar de las cuatro que tienen ahora los inmuebles, por ejemplo, o la construcción de nuevas fincas.