El mercado de los viajes de cruceros representa uno de los segmentos de la industria turística internacional que mayor crecimiento ha experimentado en los últimos años y Las Palmas de Gran Canaria no ha estado ajena a este fenómeno.

Fueron precisamente los barcos de cruceros, los que nos trajeron los primeros turistas a la ciudad antes del boom de los chárter. En la segunda mitad del siglo pasado, se dejaba ver en el Puerto de La Luz, el fantástico Queen Mary, el altivo Queen Elizabeth; la majestuosa turbonave Leonardo da Vinci; el trasatlántico Maasdam, el Empress of England o el buque polaco Batory.

Los turistas desembarcaban y se dispersaban por Las Palmas de Gran Canaria para saborear en la playa de Las Canteras y en Las Alcaravaneras, el mar y disfrutar en Santa Catalina Park, de un entorno internacional y bohemio que salpicaba las vacaciones de experiencias nuevas para contar en sus lugares de origen.

Ahora podemos presumir de un muelle de cruceros donde vuelven a atracar los grandes colosos del mar, el Independence of The Sea, el Queen Elizabeth, los habituales Aida Bella y Aida Sol, el Aurora, el Thomson Destiny o La Belle de l'Adriatique, entre otros. Son nombres a los que ya nos estamos acostumbrando. Las Palmas de Gran Canaria comienza a mostrar su proyección.

El istmo este gran espacio urbano y natural se dibuja como la mejor imagen de nuestra condición de una urbe atlántica con vocación de plataforma tricontinental. La unión de la ciudad y el puerto con el Parque Santa Catalina como el gran centro de acogida a los visitantes que llegan por el mar, debe volver a convertirse en uno de los grandes iconos de Las Palmas de Gran Canaria. En ello estamos trabajando. La nueva señalética en la zona Puerto Canteras es sólo un ejemplo de la ciudad turística que queremos.

Pero no nos vamos a quedar en esto. Por eso vamos a dotar a la ciudad de una herramienta que va a resultar fundamental para posicionarnos como puerto de excelencia de cruceros, la puesta en funcionamiento de un Club de Productos Turísticos específico para cruceros.

Una iniciativa pionera en las Islas Canarias y que consistirá en elaborar paquetes turísticos a la carta y ofrecer experiencias nuevas de viaje, alternativas que nos conviertan en un destino diferente.

Nuestro objetivo es competir ofreciendo nuevas experiencias y consolidar el turismo de cruceros como una herramienta eficaz al servicio del sector turístico y la creación de riqueza y empleo en la ciudad. En ello estamos mano a mano con la Autoridad Portuaria, con el Patronato de Turismo de Gran Canaria y con los empresarios y asociaciones profesionales, actores indispensables en este camino que nos hemos marcado.

Antes les hablaba de la época de esplendor del turismo en Las Palmas de Gran Canaria. Fuimos la cuna de la industria turística en las Islas Canarias y debemos reivindicar esa condición, no con nostalgia, sino con proyectos y objetivos a corto y medio plazo. Sin duda, Las Palmas de Gran Canaria no es la de entonces. Se ha convertido en una ciudad mejor, con mejores infraestructuras, mejor comunicada, con alojamientos modernos y una mayor oferta cultural y de ocio. Debemos empezar a convencernos de ello y a transmitirlo. Todos somos responsables de nuestra imagen en el exterior como anfitriones. El turismo es cosa de todos, administración, empresarios y ciudadanos.