Todos los actos carnavaleros programados en el parque Santa Catalina e inmediaciones en febrero se mantendrán según lo previsto. Esto al menos es lo que aseguró ayer el alcalde de la capital grancanaria, Juan José Cardona, quien consideró que el auto que ha vuelto a condenar los mogollones y le da la razón a los vecinos que denunciaron no obliga al Ayuntamiento a cambiar la programación. "Todas las actividades planeadas en la zona seguirán programándose y no hay ninguna razón para suspender o cambiar la programación prevista", sostuvo el regidor.

Los vecinos de la comunidad del edificio de la calle Simón Bolívar advierten, sin embargo, de que el auto significa el fin de los mogollones y ya han anunciado que pedirán la ejecución de la resolución. El alcalde entiende que el auto sólo le obliga a dejar libre de actos las ramblas del llamado parque blanco, pese a que la resolución habla también de Santa Catalina. Según el alcalde, el Ayuntamiento "ha cumplido siempre con las resoluciones y los requerimientos de los jueces, no solo este gobierno sino los anteriores y considero que la sentencia está ejecutada y bien ejecutada, como puso de manifiesto el Tribunal Superior de Justicia de Canarias el pasado diciembre" en una sentencia que le da la razón al consistorio.

No obstante, insistió en que el Ayuntamiento presentará un recurso de casación ante el Tribunal Supremo para que "profundice" en el asunto. El alcalde también se mostró dispuesto a iniciar un diálogo con los vecinos afectados por los ruidos de la fiesta para intentar llegar a un acuerdo y volvió a plantear la necesidad de buscar un sitio alternativo para celebrar los actos multitudinarios del Carnaval, como la zona portuaria o el parque de la Música. "El Ayuntamiento está abierto a buscar fórmulas con los vecinos que permitan, mientras el Carnaval se mantenga en el parque, que se produzcan los menores perjuicios posibles". Añadió que el Ayuntamiento "no tendría inconveniente en llegar a acuerdos que sean posibles dentro de lo razonable, "si los vecinos retiran los recursos".

La oposición pide acuerdos

Los partidos de la oposición, por su parte, coincidieron al hacer un llamamiento al alcalde para que intente llegar a un acuerdo con los vecinos que permita resolver el conflicto de una vez. La concejala socialista Inmaculada Medina, discrepó de las afirmaciones del alcalde y sostuvo que la sentencia que ordena cumplir el auto "sí que afecta a Santa Catalina". Por eso consideró que el regidor tiene que actuar "desde la cordura y sentarse con los vecinos para llegar a acuerdos y además buscar lugares alternativos" para la celebración de las fiestas.

A juicio de la portavoz de Compromiso, Nardy Barrios, "el PP insiste de nuevo en maltratar a los ciudadanos" y añadió que el Ayuntamiento debe trasladar la fiesta a un lugar alternativo.

El edil de Nueva Canarias Pedro Quevedo mostró su confianza en que el alcalde adapte los horarios y las actividades, "para que sea compatible con el derecho al descanso de los vecinos".