La trama de presuntos abusos sexuales en el seno del gimnasio de Fernando Torres Baena tiene más aristas de lo que se presume.

Claves:1.

La Sección Sexta de la Audiencia Provincial de Las Palmas juzga hoy (a partir de las 9.30 horas) a Fernando Torres Baena, María José González Peña, Ivonne González Herrera y Juan Luis Benítez Cárdenes por la presunta comisión de 99 delitos sexuales (ver cuadro). La Fiscalía pide para ellos un total de 621 años de cárcel. Casi la mitad de ellos, 303, son sólo para Torres Baena, el presunto creador de la secta del Kárate.

2. Fernando Torres Baena, como director técnico de la Asociación Deportiva Canarias 81, gestionaba las clases de kárate para unos 700 alumnos. Con el Gimnasio Torres Baena, su buque insignia, logró más de 300 medallas a nivel nacional e internacional. Solo los mejores luchadores eran aceptados en el centro de kárate más prestigioso de la Isla.

3. Al lado de Torres Baena se encontraban dos mujeres: María José González Peña e Ivonne González Herrera. Ellas eran, además de monitoras en centros y colegios, las responsables, tras él, de la gestión de la Asociación Deportiva Canarias 81.

4. Una denuncia a finales de enero de 2010 contra Torres Baena destapa los presuntos abusos sexuales y corrupción de menores que se vivía en el seno de la Escuela de Kárate Torres Baena. La investigación saca a la luz una realidad que se remontaría supuestamente hasta los años 80.

5. Las declaraciones de 61 víctimas durante la instrucción revela, según la Fiscalía, la utilización de un supuesto sistema de manipulación del maestro hacia sus alumnos menores de edad para corromperlos, plegar su voluntad y someterlos a abusos sexuales, ya fuese con él o con otros compañeros.

6. El chalé, propiedad de Torres Baena, en la playa de Vargas, era el lugar elegido para realizar concentraciones, aparentemente deportivas de los integrantes del gimnasio, que se transformaban en supuestas bacanales donde el sexo, las drogas y el alcohol adquirían el protagonismo, según asegura el fiscal en su acusación.

7. La supuesta manipulación de Torres Baena impedía a sus víctimas ver la realidad adecuadamente. Los logros competitivos de otros alumnos también eran utilizados por el maestro para demostrar la eficacia de su método y continuar con los supuestos abusos sexuales.

8. Las otras acusadas, imbuidas de la doctrina de Baena, encontraban nuevos alumnos en centros y los enviaban al gimnasio para tener siempre nuevas víctimas, asegura el fiscal.

9. En la fase de instrucción, de las 61 presuntas víctimas sólo se pudo acreditar de 38 que hubiesen sufrido los supuestos abusos sexuales y que el delito no hubiese prescrito. Sin embargo, los investigadores temen la existencia de centenares de personas que vivieron dentro de la secta del Kárate y que nunca lo han contado. Los acusados, por su parte, defienden que todo lo que se ha contado no es cierto. Según la versión que defenderá Torres Baena, la denuncia se debió a un complot de un grupo de antiguos trabajadores de la Asociación Deportiva Canarias 81 que buscaba desacreditarlo para robarle los alumnos de una entidad que ingresaba unos 20.000 euros anuales.

10. Las partes, cuatro abogados en la defensa, dos en la acusación particular así como la Fiscalía, han citado a una legión de testigos, 150, para acreditar los supuestos abusos sexuales que sufrieron las 38 víctimas o negarlos. Las declaraciones de estas 188 personas se presumen muy duras.