El Hospital Doctor Negrín cerró el pasado lunes parte de la planta de Traumatología. Los trabajadores -que han tenido que ser reubicados, al igual que los pacientes- denuncian que esta es una de las consecuencias de los recortes económicos y que la medida perjudica a los enfermos porque lo más beneficioso para ellos es que sean atendidos en su especialidad.

En cambio, fuentes de la gerencia del Negrín argumentan que se trata de una "mejora de los recursos" porque hay una "bajada de la estancia media" en esta especialidad. Las mismas fuentes sostienen que no se trata de un cierre, sino que "se queda operativa sólo la mitad de la planta". Asimismo la gerencia explica que con el personal de Traumatología se han reforzado otras áreas del hospital y que en el caso de que aumente la estancia media de los pacientes, se volverá a poner en funcionamiento.

Por su parte, los sanitarios acusan a la dirección de haber antepuesto el aspecto económico a la salud de los pacientes porque aseguran que la planta estaba "casi llena". Además, recuerdan que estas medidas se toman desde hace un par de años exclusivamente en los meses de verano y que es la primera vez que se hace antes.

El Negrín reconoce que no es una situación "habitual", pero que es una medida que "se ha estudiado" independientemente de las soluciones que se den en los meses de verano en los que al "descender la demanda asistencial" se está prescindiendo en los últimos años de algunas plantas.

Según los trabajadores del Servicio Canario de Salud, a los pacientes les van colocando donde quedan habitaciones libres "para ahorrar". Una medida que afecta al personal porque al haberse producido cambios a algunos de ellos les han comunicado que no pueden cogerse las vacaciones tal y como tenían previsto.