"El solar de la Cícer debería ser un espacio multifuncional"

Muy arraigados en Guanarteme -son la tercera generación que vive allí-, creen que si algo identifica al barrio es su familiaridad. La propuesta municipal de ensanchar aceras en algunos zonas de la ciudad para dar más espacio al ciudadano hila esta conversación a dos bandas.

PEATONALIZACIÓN

Desirée Hernández (DH): Sinceramente creo que la peatonalización de espacios en las grandes ciudades es calidad de vida, no cabe la menor duda.

Alberto Cabrera (AC): También lo creo. Al principio las reticencias más grandes son de los empresarios y los comerciantes de la zona, pero a la larga va a ser un beneficio.

DH: Claro.

AC: Cuando se peatonalizó Vegueta, la calle Mendizábal, La Pelota, ocurrió lo mismo. Y ha sido un éxito para la hostelería, se ha revitalizado la zona.

DH: Hablando estos días con un amigo a propósito de la peatonalización, que para mí es calidad de vida siempre y cuando se respete la carga y descarga para los comercios. Igual que para los vecinos que tienen garaje. Supongo que lo tendrán contemplado porque si no no sería lógico. Bueno, hablando de ello me recordó, aunque yo no tengo edad para ello, que cuando se peatonalizó Triana fue un escándalo. Tú no tienes edad, pero pregúntale a tu madre, a tu padre. La gente se puso en pie de guerra. Decían que cómo una señora cargada con paquetes no iba a poder coger un taxi en la puerta de un comercio. Hasta que luego se dieron cuenta de la ventaja. Cuando leí lo de ensanchar las aceras en un tramo de Fernando Guanarteme, Olof Palme hasta la playa, el primer pensamiento que tuve es que va a acercar la playa, como que el paseo será más grande. Un señor que tenga un comercio puede decir que los coches no paran y que la gente no entra a comprar. Pero el que compra es el viandante.

AC: Ahora mismo hay un estanco en la calle Portugal que tiene muchos problemas con la policía porque la gente se acostumbra a parar el coche un momento y comprar el periódico. La gente ya va caminando o en bicicleta a comprar.

DH: El que va en coche es un posible comprador pero no es seguro, salvo que aparque.

AC: Es positivo. Aunque debería haber luego un control porque ya ocurrió cuando peatonalizaron las calles transversales a la playa. Al final, están estupendas pero abandonadas. Si no hay una acción paralela a lo que es peatonalizar la zona al final se van a quedar como todas estas calles. Oscuras y lúgubres porque sólo pusieron los adoquines y se quedó ahí.

DH: Espero que esto sea un primer paso para continuar mejorando el barrio. Porque cada vez está mejor.

AC: Eso está fuera de toda duda.

DH: Otra cosa muy importante que he oído de este proyecto es que la bicicleta va a tener mucho protagonismo. Me parece maravilloso.

AC: A mí también.

DH: Siempre he huido de la Policía Local cuando de pequeña iba por la avenida con la bicicleta. Todo es prohibir porque sí. El ciclista también puede disfrutar de la avenida, a otras horas que no haya tránsito de familias. Lo que no entiendo es que vaya un tío con patines y no con bicicleta a una velocidad de paseo.

AC: Estoy totalmente de acuerdo contigo en ese prohibicionismo que hay bestial. Creo más en la educación. Somos duros de mollera, pero hemos visto que poco a poco la gente cada vez está más concienciada. Aunque siempre habrá incívicos en muchas cosas. Como con las cagadas de los perros. Los guarros no son los perros, sino sus dueños. Si tú multas a una persona ya se conciencia.

DH: A pesar de esto hay que reconocer que cada vez está mejor el barrio. Conserva aún cinco o siete manzanas muy tradicionales, con familias de toda la vida, que es lo que configura playa Chica hasta los Momos [Olof Palme]. Creo que es un primer paso para mejorarlo. ¿Que hay cosas que hacer? Indudablemente.

LAS CANTERAS

AC: En ese sentido, creo que para regir los destinos de la playa debería hacerse con el consenso de vecinos, científicos e instituciones.

DH: Eso existe de alguna manera pero de forma anarca. La playa tiene muchos mecenas y muchos protectores.

AC: Eso sí, pero me refiero, por ejemplo, a que pusieron la señalización nueva en la avenida y había errores de bulto gravísimos. Eso es imposible si tú has consultado previamente a alguien que vive aquí. Es tan sencillo como informarte o preguntar a personas como Paco Bello, Tino Armas, personas que sabemos que están al pie del cañón. Siempre he pensado que la gestión de la playa tenía que ser una cosa consensuada. No tan política sino entre vecinos, artistas... Por ejemplo, ahora se quieren cargar el mural de Manolo Padorno. Eso es una obra de arte que, en otro lugar, hubiera sido considerada como tal y aquí pasa a ser un objeto urbanístico que cuando no interesa se lo cargan. Un poco de conciencia artística, paisajística y de todo. Sí que es verdad que la presión de la población ha hecho evolucionar algunas zonas aunque no ha acabado con los sitios más emblemáticos. Guanarteme es uno de los barrios donde más población ha llegado en los últimos años. Estaba Mesa y López y Fernando Guanarteme y ahora, fíjate. Y no te quiero decir nada de la Cícer a los muellitos. Aquello era un paisaje marginal. Este barrio ha experimentado un poco la dinámica de La Isleta. La gente que ha vivido ha procurado que sus hijos se quedaran. Guanarteme vivió el boom inmobiliario. Se tiró mucho y se construyó mucho. Ahora con la crisis se acabó todo eso. Propiciado por ese boom, por esa tradición familiar o por arte de magia, se ha creado un circuito cultural importante. Cada vez hay más gente joven que se ha venido a vivir aquí. Sobre todo en la zona del Auditorio, la plaza del Pilar. Hay colectivos deportivos, escuelas de surf, locales multiculturales, bares, que están conformando algo muy interesante.

DH: No hay que ir más lejos que lo que vivimos cada fin de semana con Playa Viva.

AC: Eso ha sido un acierto.

DH: A mí es que me cuesta mucho decir algo malo de la playa, de verdad. ¿Que las cosas se pueden mejorar? No cabe la menor duda. Pero seguimos estando lo más cerca del paraíso.

AC: Todos los políticos deberían seguir la misma línea: que el centro de acción fuera Las Canteras. Que no hubiera un interés partidista por ganar puntos, sino que lo que se haga sea para sumar. Y el que venga detrás, que sume al anterior y, así, sucesivamente. Porque al fin y al cabo todo va a revertir en beneficio de todos nosotros, de la playa. Y, mejorando, como tú dices. Antes se valoraba esto, pero ahora es un sitio de lujo. Todos sabemos a cuánto se han vendido las viviendas. Es que los que vivimos aquí somos los más afortunados del mundo.

DH: Los pisos aquí no se devalúan. Otro ejemplo de esa familiaridad del barrio, de unidad, es el caso del parque de Pino Apolinario, un parque que levantaron y cuidaron los vecinos. Sé que ha habido cierto conflicto con el Ayuntamiento porque lo quiere acondicionar, aunque ya se ha consensuado hacer una zona infantil. Va haber incluso una prueba con la instalación de un huerto urbano.

AC: Es que hay una tendencia a pensar que como en la playa se pueden hacer todo tipo de actividades ya no necesitamos equipamientos e infraestructuras de otro tipo. Guanarteme ha demando eso desde hace muchos años. Hay unas pequeñas canchas en la plaza de Churruca que es un hervidero de gente, lo que significa que son necesarias.

DH: Es una maravilla pasar por ahí y ver a los jóvenes jugando.

AC: Lo ideal sería ocupar los espacios que quedan libres, por ejemplo el de la Cícer. Conozco varias propuestas y cada vez que viene alguien al Consistorio hay una nueva. A ver si algún día se plasma porque ese es el espacio más grande que tiene el barrio para hacer algo digno. De este tipo, deportivo o cultural para todos los ciudadanos. Ahora hay un aparcamiento que dejó en herencia el PP y se quedó abandonado. Se supone que las iniciativas deben llevarse a cabo y no dejarlas de la mano del señor.

DH: Un espacio para todas las edades. Una sala de proyecciones, una sala de arte.

AC: Un espacio multicultural.

DH: Imagino que lo estarán pensando. Sería un espacio ideal para un lugar de encuentro de todos los vecinos, para que todos puedan plantear sus reivindicaciones. Un espacio multifuncional porque no todo es deporte. Para el alma, también. Con esas vistas que tiene para la playa.

AC: Lo último que había era hacer un spa, una talasoterapia. La verdad es que todo queda en proyectos grandilocuentes, aunque ahora la verdad no hay dinero para asumir nada. De todas maneras, ahí esta la Biblioteca Josefina de la Torre, que funciona muy bien, aunque está destartalada y sea un barracón prefabricado. Pero se está usando.

DH: Es maravilloso tener una biblioteca en la playa por humilde que sea su soporte.