Medio siglo situado en la avenida de Escaleritas, justo al lado de Cáritas. El Colegio Santa Isabel de Hungría fue promovido en 1962 por el sacerdote José Rodríguez y Rodríguez (Juncalillo, Gáldar, 1912 - Las Palmas de Gran Canaria, 2008). Este hombre visionario, que también instauró el primer grupo reconstituidor de leche líquida en Cáritas, así como el ropero diocesano, y la escuela internado de sordos, no podría sospechar hoy cuántos alumnos han podido salir adelante gracias a su primer impulso solidario y educativo.

Santa Isabel de Hungría es un centro de carácter concertado, uno de los tres únicos de este tipo de Bachillerato de la Isla. Según comenta uno de los profesores más veteranos, Francisco Socorro, ''el colegio nació como femenino y anexo del Isabel de España, y en el curso 92-93 se convirtió en mixto''. Además, apunta que adquirió importancia en la zona debido a que ''en la parte alta no había institutos de Bachillerato. Los alumnos venían de zonas como Arucas, Gáldar o Firgas''.

En los años 90 del pasado siglo fue Alejandro González, recientemente fallecido, quien se encargó de gestionar la labor del Centro. En la actualidad, Santa Isabel de Hungría forma, junto con los centros Santa Catalina y Nuestra Señora del Pilar, los Institutos Diocesanos.

Con los años, el colegio ha ido creciendo. Actualmente cuenta con ocho unidades en ESO y seis en Bachillerato. El claustro de profesores también ha aumentado y hoy en día está formado por 25 profesores. La mayoría lleva toda su vida en el centro y recuerdan, emocionados, las distintas etapas y momentos vividos.

La jefa de Estudios, Fátima Santana, rememora con especial cariño la década de los 90, cuando ''todos colaborábamos como una piña para sacar adelante el colegio, incluso en verano llegamos a pintar pizarras y arreglar desperfectos''. Ángeles Martínez, profesora de Inglés, señala que ''seguro que las antiguas alumnas recuerdan los emotivos sermones de don José Rodríguez reproduciendo la historia de Santa Isabel de Hungría cada 17 de noviembre, el día de la santa''.

Muchísimos son los estudiantes que han pasado por sus aulas, y los profesores los recuerdan a todos con increíble memoria. Algunos de ellos han destacado en distintas áreas. Son bastantes los que se dedican al deporte: Blanca Ares y Patricia Hernández, olímpicas de baloncesto en Barcelona 92, además de Estela Nuez, Laura Mujica o Lourdes Peláez, todas jugadoras de baloncesto, pues el colegio tuvo un convenio con el Club Baloncesto Islas Canaria.

También el pianista Iván Martín, el portero de fútbol Orlando Quintana, el novelista Miguel Aguerralde, periodistas como Nayra Santana o Marian Álvarez, además de jueces, abogados, profesores... y muchos más que son recordados en las orlas que decoran las escaleras del centro en una exposición que llama la atención al visitante.

Pero no sólo el colegio ha aumentado en metros cuadrados, también ha avanzado en material didáctico y planes de calidad. Según señala la directora, Victoria Navarro, el centro ''ha incorporado la plataforma Educamos con la que se mantiene un contacto directo con las familias; además proyectos innovadores como el Plan Conecta, dirigido por el profesor de Informática Manuel Santana, mediante el cual alumnos de Bachillerato imparten clases a adultos de la zona''.

También destaca que el centro posee desde el año 2005 el sello de calidad Eduqatia. Dos alumnos, Rubén Reyes y Agustín Arizcun, han recibido en los dos últimos años el premio canario a los mejores expedientes académicos. Han quedado finalistas en la última edición del concurso de El País de los Estudiantes, coordinados por la profesora de Lengua y Literatura María Ángeles Moreno. Y participan cada año en los juegos deportivos Emde, entrenados por el profesor de Educación Física, Óscar Armas.

Cada año celebran, con bastante éxito, una Gala Solidaria y una obra de teatro proyecto de la asignatura de Mitología, creada por el propio alumnado y dirigidos por María José Pavón.

Muchos son los alumnos que recuerdan, con el paso de los años, sus vivencias en el colegio, destacando todos el ''ambiente familiar'' que impregna el centro. Entre ellos, Javier Sampedro da algunos detalle de su primer año en el centro, dado que ''era el primer curso de los chicos en el instituto. Éramos la novedad y muy mimados por eso mismo''.

Para otros, como el novelista, Miguel Aguerralde, su paso por el colegio ''fue muy especial, debido a que me dio una familia de amigos y de profesores con los que compartí los dos mejores cursos de mi vida'', explica con evidente cariño hacia esa etapa de su vida académica.

Otra alumna del Santa Isabel de Hungría, Teresa García, asegura que tiene una sobrina que ha comenzado este año en primero de la ESO bajo recomendación de su tía. Los profesores más antiguos dan clase hoy en día a muchos hijos de alumnas de sus primeros años de docencia.

Para estos días de celebración se están organizando distintos eventos para conmemorar el 50º aniversario del instituto, como conferencias y otros actos de los que se informa puntualmente en la página web del centro. El equipo directivo del veterano centro, que se siente como el que cumple sus bodas de oro, espera a los actuales y antiguos alumnos, junto a los profesores, para rememorar los años compartidos.