La cooperativa de pescadores de San Cristóbal prevé abrir una lonja en el muelle pesquero de la capital grancanaria al final del próximo verano. La pesca artesanal tendrá así un punto de primera venta en La Luz, al que podrán acudir tanto mayoristas como particulares, y que además servirá para almacenar las capturas de pescado fresco que se destinen de forma inmediata a otros mercados.

Buena parte de lo que obtiene en el mar la flota del barrio marinero se ha enviado tradicionalmente a la isla de Tenerife, bien de forma directa o a través de una empresa de distribución grancanaria. El resto de las capturas se reparten en el mercado interior, especialmente, en restaurantes de la zona donde se localiza la cooperativa, en la capital grancanaria. Los pescadores ya han estado evaluando los frigoríficos existentes en el muelle, y también aguardan a que la Autoridad Portuaria cifre las tasas que deberán liquidar por el uso de este espacio. Con todo, Yeyo Saavedra, presidente de la entidad, confirmó que esperan poder abrir la lonja en torno al próximo mes de septiembre.

Saavedra indicó que "las instalaciones no están en muy buen estado", con lo que la cooperativa deberá asumir una inversión para adecentar los equipos actuales, que ha puesto a disposición el Puerto en su área habitual de atraque. Pero los planes de la cooperativa son los de incrementar su actividad en el mismo muelle pesquero. "Ya estamos instalados en San Cristóbal", indicó su presidente, "pero queremos que nuestra base principal sea en La Luz".

"Será la primera lonja en el Puerto en muchos años", recordó el representante de los artesanales, no sin subrayar que "los armadores también necesitan un servicio para los barcos que llegan a descargar". Los pescadores de San Cristóbal quieren incluso poder abrir una pescadería en meses sucesivos, que aumente el atractivo del muelle de cara a la ciudad y que atraiga a compradores a la zona.

Acuerdo en La Luz

Los representantes de la cooperativa mantuvieron semanas atrás una primera reunión con el presidente de la Autoridad Portuaria, Luis Ibarra, en el que recibieron el visto bueno a sus demandas. Entre ellas también se incluía la de disponer de un nuevo pantalán para el atraque de los barcos. Para ellos, el muelle tiene en la actualidad demasiada altura cuando baja la marea, con lo que se ven obligados a redoblar los esfuerzos para poder descargar las capturas a tierra. En ocasiones, ésta queda hasta dos metros por encima de las embarcaciones.

El Puerto ya ha comenzado a estudiar cómo ejecutar y financiar la nueva estructura, que, de cualquier modo, ha confirmado que se llevará a cabo. Su ejecución se pagará con recursos propios, y se considera necesaria para mantener el reducto de la actividad artesanal en unos muelles que en el pasado se caracterizaron por el intenso tránsito de pesqueros -españoles y extranjeros-, pero que en el marco actual han disminuido considerablemente su peso en el sector. Los convenios suscritos por Bruselas con los países africanos han terminado por lastrar a la pesca en las Islas, en general, y en La Luz, en particular. Una lonja y un nuevo pantalán son los recursos con los que en adelante podrán contar los pescadores locales.