El ciclismo, entendido como deporte y salud, sin hacer mención al ciclismo profesional, es un deporte aeróbico que al practicarlo de forma moderada ponemos en marcha el consumo de otro tipo de depósitos: nuestros depósitos de grasa. La utilización de esta grasa corporal como combustible muscular nos asegura poder contar con una disponibilidad mucho mas extensa de combustible, así la fatiga muscular se presenta mucho mas tarde en la practica del ciclismo que en otros deportes y esta movilización de nuestros depósitos de grasa provoca una serie de cambios en nuestro perfil lipídico muy beneficiosos para nuestra salud.

El organismo humano como consecuencia del entrenamiento físico regular permite, por una parte, prevenir o retrasar la aparición de determinadas enfermedades y, por otra, mejorar la capacidad de realizar un esfuerzo físico. Además, existe una relación entre la actividad física y la esperanza de vida. El ejercicio físico regular mejora nuestra calidad de vida y nos permite desde el punto de vista psicológico afrontarla con mayor optimismo y mejor disposición, a la vez que socialmente es un medio de integración en distintos grupos humanos.

Aquellas personas que se inician en este deporte, han de tener en cuenta que se debe aumentar progresivamente tanto en intensidad como en dificultad. Si se trata de personas mayores de 40 años, antes de iniciarse deben pasar un examen médico previo para descartar posibles enfermedades cardíacas, arritmias o similares no conocidas.

Es recomendable, antes de practicarlo, mantener una buena flexibilidad y un tono muscular adecuado ya que tiene un efecto protector frente a lesiones y a la vez mejora el rendimiento y permite aumentar el abanico de posibilidades que nos ofrece esta saludable actividad.

En cuanto a las contraindicaciones, el ciclismo no profesional es un deporte que apenas las tiene, excepto en aquellas personas con enfermedades cardíacas y respiratorias en la que su médico las haya desaconsejado. Sin embargo esta especialmente indicado en aquellos que sufren enfermedades articulares, como artritis o artrosis, y que quieren evitar el ejercicio con carga, siempre y cuando la intensidad y duración del mismo se adecue a las condiciones individuales de cada uno.

Beneficios de montar en bicicleta

  • Disminuye el riesgo de mortalidad por enfermedades cardiovasculares en general
  • Previene y/o retrasa el desarrollo de hipertensión arterial, y disminuye los valores de tensión arterial en hipertensos.
  • Reduce los triglicéridos y aumenta el colesterol HDL.
  • Mejora la regulación de la glucemia y disminuye el riesgo de padecer diabetes no insulino dependiente.
  • Mejora la digestión y la regularidad del ritmo intestinal.
  • Disminuye el riesgo de padecer ciertos tipos de cáncer, como el de colon.
  • Incrementa la utilización de la grasa corporal y mejora el control del peso.
  • Ayuda a mantener y mejorar la fuerza y la resistencia muscular, incrementando la capacidad funcional para realizar otras actividades físicas de la vida diaria.
  • Ayuda a mantener la estructura y función de las articulaciones.
  • Mejora la imagen personal y permite compartir una actividad con la familia y amigos.
  • Ayuda a mantener la estructura y función de las articulaciones.
  • Ayuda a liberar tensiones y mejora el manejo del estrés.
  • Ayuda a combatir y mejorar los síntomas de la ansiedad y la depresión, y aumenta el entusiasmo y el optimismo.
  • Ayuda a controlar y mejorar la sintomatología y el pronóstico en numerosas enfermedades crónicas (Cardiopatía isquémica, Hipertensión arterial, Enfermedad pulmonar obstructiva crónica, Obesidad, Diabetes, Osteoporosis, etc.).