Es, sin duda, una de las licitaciones más esperadas en La Luz en los últimos años. La antigua terminal de Contenemar está inmersa en pleno concurso público, cuyas bases ha publicado en estos días la Autoridad Portuaria. Se dará en concesión una parcela "polivalente"y "abierta al uso general" en el Muelle de Gran Canaria. El Puerto podrá obtener al año unos 400.000 euros en tasas por un espacio que le había dejado de rendir ingresos en los últimos años. En abril de 2012, de hecho, procedió a la expulsión de Líneas Marítimas Canarias (LMC) y la naviera Contenemar por el impago de las contribuciones. Ahora también abre la puerta a que el sector con mayor actividad en La Luz, el de las reparaciones de plataformas y flota petrolífera, pueda aprovechar este enclave en un momento en el que talleres y astilleros buscan hueco para su expansión.

La antigua terminal de Contenemar ya está siendo explotada con este fin, con carácter temporal, por la compañía Hidramar, que inspecciona y arregla el material que la multinacional Oil States suministra a las plataformas petrolíferas que operan en el Golfo de Guinea. Esta firma tiene permiso hasta marzo para ocupar un espacio que incluye una gran explanada de hormigón y una nave. En total, la superficie que explotaba Contenemar y LMC ronda los 70.000 metros cuadrados, con un punto de atraque para los movimientos de mercancías.

Si bien el Puerto abre la posibilidad de que los talleres puedan tener cabida en este suelo, tampoco pierde de vista el momento por el que pasa en tráfico de mercancías en La Luz, con un descenso que en noviembre se situaba en más de un 16% con respecto al año anterior. Así, en la pliego de bases del concurso se pide a las empresas que concurran en la licitación que presenten su plan para atraer operadores en el movimiento de contenedores. En cuanto a la oferta económica, no se imponen mínimos pero si se contempla que el adjudicatario final deberá realizar una fuerte inversión en el recinto. La concesión tendrá un plazo mínimo de 15 años y un máximo de 22. Se impone, igualmente, que la empresa que explote el espacio desembolse inicialmente el 20% de su inversión, con un mínimo de 600.000 euros.

La fecha tope para presentar los proyectos es el 17 de marzo. El 29 de mayo está previsto que se proceda a una apertura de plicas en la que se espera a varios aspirantes. Eso sí, todavía no se ha formalizado ninguna oferta. Éstas se aguardan para los últimos días del plazo establecido.

De cualquier modo, la Autoridad Portuaria, que aprobó la convocatoria del concurso en su consejo de administración de noviembre, podrá reutilizar un suelo muerto en los últimos ejercicios, que no ha reportado beneficio alguno a la administración desde que salieran sus antiguos concesionarios. En 2014 la antigua terinal de contenedores tendrá al fin un destino concreto para un futuro a largo plazo.