Los padres de un joven de 19 años han denunciado en el juzgado de guardia de la capital grancanaria al Hospital Insular por la muerte de un hijo que ingresó aquejado de un envenenamiento al beber de manera accidental un herbicida, según los hechos que el padre del chico puso ayer en conocimiento de la autoridad judicial, tan sólo unas horas después de que se produjera el fallecimiento de R. M. A. en el complejo hospitalario de la Avenida Marítima.

El joven ingresó en urgencias del Insular a las 22.00 horas del pasado miércoles. Acudió al hospital porque había ingerido un herbicida al confundirlo con un refresco y se encontraba mal. Le dieron el alta médica una hora después, tras practicarle un lavado de estómago y una endoscopia, pero el miércoles, a las 21.00 horas, volvió a urgencias con las mismas molestias. Falleció ayer a las 11.00 horas, según el breve relato de los hechos realizado por su familia.

En ese escrito, el padre del chico ha solicitado al juez que se le practique a su hijo una autopsia judicial para aclarar las causas de la muerte. Los afectados consideran que puede haber una negligencia médica por parte del hospital, pues consideran que no se valoró de forma correcta la peligrosidad del producto ingerido y se le dio el alta médica sin ningún control, lo cual, según los padres, motivó que el envenenamiento causado por el accidente doméstico derivase en la muerte del joven. El Hospital Insular, a través de su gabinete de prensa, declinó hacer una valoración al encontrarse el asunto judicializado.

Y es que todas esas circunstancias debe investigarlas ahora el Juzgado de Instrucción número 2 de Las Palmas de Gran Canaria, que ayer estaba en funciones de guardia en la Ciudad de la Justicia de la capital. Su titular, Rafael Passaro, ha autorizado la necropsia, que tiene que realizar el Instituto de Medicina Legal de Las Palmas en los próximos días.

El resultado de esa autopsia será fundamental para que el magistrado abra o no diligencias penales por una presunta negligencia médica, pues los expertos en medicina legal son los encargados de informar al juzgado de las causas de la muerte del joven, así como de aclarar si su fallecimiento encaja con el relato de los hechos avanzado por los familiares en la petición de autopsia que ayer cursaron ante el magistrado.

Los abogados de la familia creen que los médicos erraron en el tratamiento y esa equivocación derivó en el fallecimiento del muchacho. Se basan en que los facultativos no se interesaron en el prospecto del producto químico para evaluar su peligrosidad, sino que supuestamente lo mandaron a su casa tras practicarle dos endoscopias, dos lavados de estómago y recetarle unas pastillas para evitar una úlcera estomacal, cuando podían haberlo dejado en observación para comprobar su evolución en el mismo hospital.