La llamada industria offshore, a la que se adscriben las grandes plataformas petrolíferas, ha traído más de un extraño ingenio a La Luz. Desde que las perforadoras escogieran a comienzos de siglo el Puerto de Las Palmas para sus escalas técnicas y reparaciones, en la bahía han aparecido colosos con grandes brazos articulados o grúas, nuevos buques dotados para extraer hidrocarburos a grandes profundidades y una innumerable flota de supplies: barcos concebidos para prestar asistencia en las explotaciones en mitad del océano, de proas futuristas y llamativos apósitos, como sus helipuertos. Esta semana otra estampa novedosa ha ampliado semejante catálogo, dibujando una silueta en el horizonte de la capital grancanaria: la del Safe Boreas, que más que una plataforma es un hotel flotante construido para albergar a los trabajadores del negocio.
El flotel se acabó de levantar el pasado mes de octubre en Asia, en el astillero de Jurong, en Singapur. Actualmente, el buque de la compañía Prosafe viaja en su travesía inaugural desde Singapur hasta Stavanger, en Noruega. En La Luz ha parado, consignada por la firma Erhardt, para una escala de avituallamiento de víveres y combustible. También para el desembarco de un centenar de tripulantes.
Su reemplazo, otros tantos efectivos, han estado alojados en hoteles de la ciudad, para incorporarse ahora a esta llamativa plataforma sin torre, pero con grúas auxiliares en los costados. Estos empleados han podido disfrutar de la capital grancanaria, ya sin las dificultades para encontrar habitación que sí tuvieron las naves que cambiaron de tripulación durante las fechas del pasado Carnaval y la Copa del Rey de baloncesto, que se celebró en Gran Canaria. Entonces, estos marinos y técnicos tuvieron que acomodarse en Vecindario o el Sur de la Isla.
La Safe Boreas ha sido definida por su propietario, la compañía Prosafe, como "el más avanzado y eficiente hotel plataforma en el mundo". La misma empresa es líder global en el singular sector de las naves concebidas como alojamientos flotantes: maneja una docena de buques que tienen este mismo propósito, con servicios incluídos como los del catering, la atención médica u oficinas a bordo. Además del personal necesario para atender a sus huéspedes.
La flota de Prosafe se despliega en los mares de Noruega, Reino Unido, México, Estados Unidos, Brasíl, Australia, Filipinas o Rusia, para facilitar a los armadores del mercado offshore un lugar accesible en el que acomodar a su personal, sin alejarse de sus explotaciones en el océano.
En este caso, la Safes Boreas tiene un contrato con Lundin Petroleum en Noruega, para ejercer de soporte en las operaciones de la plataforma Edvard Grieg, en la fase inicial de una nueva explotación petrolífera.
La capacidad de este flotel es de 450 huéspedes. Como las grandes naves del sector, está dotada con un sistema de posicionamiento dinámico en el mar, que le permite fijar su posición sin oscilaciones. De hecho, la Safe Boreas (nombre que toma del dios griego de los vientos del Norte) utilizó este recurso durante la jornada de ayer, para mantenerse situada a unos sesenta metros del dique Reina Sofía.
Perspectivas del sector
El negocio de las explotaciones de petróleo offshore está sujeto a frecuentes cambios. Como la bajada actual del precio del crudo, que ha hecho que muchas plataformas dejen de operar, porque, con los costes actuales, sus actividades no resultan rentables a sus armadores. Por otro lado, la aparición de nuevos pozos obliga a una permanente renovación de los campos de producción, al tiempo que se desmantelan otros viejos. Así, Prosafe mantiene expectativas optimistas para su propio futuro, como empresa especializada en ofrecer estos alojamientos en mitad del mar.
De hecho, la compañía espera poner en funcionamiento el próximo verano una nave hermana de la Safe Boreas, la Zephyrus Segura, también en el Mar del Norte. Sus prestaciones serán similares, con una docena de puntos de amarre en una estructura que no solo proporciona alojamiento a los trabajadores. Entre sus misiones figura las de prestar asistencia logística a los grandes perforadores, cuando están inmersos en sus campañas de explotación. No solo los supplies cumplen esta función estratégica.
