"Hemos descubierto que África no es del todo pobre y que cada país es diferente". Es la reflexión que ha hecho Óscar Jesús Santana, un alumno de tercer curso de la ESO del IES de Jinámar (Telde) tras leer la novela del escritor grancanario Antonio Lozano, Me llamo Suleimán, donde se cuenta la historia de un joven maliense que huye de la pobreza hacia Europa. El estudiante, junto a sus compañeros de clase, investigó en la historia, la economía, la naturaleza y la población del continente para demostrar ayer su tesis y hacer comprender a los cientos de escolares que participaron en la cuarta edición del Congreso de Jóvenes Lectores de Gran Canaria que la realidad actual de África es producto también de un pasado colonial. Fue la vuelta de tuerca que le dieron a la historia de Suleimán. Y es que cada libro tiene más de una lectura.
Como Óscar y sus compañeros, más de mil escolares de Primaria, Secundaria y de Bachillerato de 32 centros de la Isla y de Fuerteventura, han mostrado durante tres días su talento con la interpretación libre de una lista de obras de la Literatura Infantil y Juvenil actual y su puesta en escena en diversos formatos -teatro, vídeo, cartas, canciones, animaciones, presentaciones en power point, malabares; entre otros- que ha dejado boquiabiertos a los propios escritores. Así lo señalaron ayer los escritores versionados Marcos Calveiro, Antonio Lozano, Daniel Bautista y Francesc Miralles en el Teatro Guiniguada, en la última jornada de trabajo de este encuentro, organizado por la Consejería de Educación para fomentar la lectura, la creatividad y la socialización entre los jóvenes.
El escritor catalán Francesc Miralles reconocía que "lo mejor de la profesión es escuchar a los lectores, tener contacto con los que te han seguido" porque eso le motiva a seguir escribiendo.
Al escritor le sorprendió la "compresión profunda" que habían hecho los jóvenes de las obras y el grado de "madurez" y de "meditación" al poner su interpretación de la misma sobre el escenario.
El autor ha logrado transmitir en Si cree en mi, te sorprenderé, uno de sus últimos trabajos, el mundo de la joven Anna Vives, que con Síndrome de Down ha creado una tipografía en formato digital muy especial; y que ayer estuvo también con los chicos para poner de manifiesto con un "¡Viva Gran Canaria¡" que todo es posible. Como dijo su hermano, Marc, "todos tenemos capacidades" y animó a los chicos a escribir y a soñar en los blogs.
El grancanario Daniel Bautista, por su parte, felicitó a los jóvenes y profesores por "el trabajo de semanas y meses" y les motivó a seguir leyendo. "A que la lectura se convierta en lo que es: diversión y no un castigo o algo soporífero".
Antonio Lozano, por su parte, que acudió como Bautista por tercer año consecutivo al encuentro, comentó que siempre es un "momento mágico" descubrir lo que han visto los jóvenes en la lectura de Me llamo Suleimán.
"Pero ¿Qué libros les han influido para comenzar a escribir?", preguntó una joven curiosa desde la platea. El narrador Miralles confesó que Shidarta, de Hermann Hesse, aunque subrayó que en "cada época de la vida hay un libro o libros que nos marcan"; Lozano indicó que La Metamorfosis, de Kafka, "una novela que ha releído" junto a otras muchas de "intriga y policiacas"; Bautista, autor de La playa de las mujeres o Mi puzzle del mundo, concretó que los cómics "hasta los 20 años", mientras manifestó a los jóvenes que lo importante "es que lean" porque a lo largo de la vida "leerán otras cosas" y Calveiro, premio Lazarillo en 2009 con El pintor del sombrero de malvas, sorprendió a la audiencia al revelar que la Enciclopedia Larousse, "los doce tomos de la A a la Z ". "De pequeño era un friki", reconoció de broma el literato, que justificó algo más en serio su pasión por las enciclopedias y los diccionarios porque es como un carpintero "me rodeo de las mejores maderas y herramientas para buscar las palabras para mis libros".
