Más de un centenar de usuarios de la Biblioteca Pública del Estado presentaron el pasado jueves un escrito, ante la Consejería de Cultura del Gobierno de Canarias, para protestar por el cierre de este equipamiento durante los fines de semana del mes de agosto.
Los firmantes, 103 personas concretamente, manifiestan su "más unánime rechazo ante el cierre del servicio y actividad" de este equipamiento, ya que consideran que debe estar "al interés de los usuarios que somos los que con nuestra participación, uso y disfrute de este derecho, damos consistencia y vida a la biblioteca". No comparten la justificación de falta de personal, ya que "los regidores públicos tienen el deber de gestionar y garantizar los servicios a los que los ciudadanos tenemos derecho, a los que contribuimos con nuestros impuestos".
En el escrito se explica que son muchas las familias que se acercan a la Biblioteca para disfrutar de sus actividades. "Somos defensores de la importancia de lo que es una biblioteca como un espacio que dinamiza la cultura, la cual en estos momentos tiene la espada de la demolición a la que nos oponemos por ser este un espacio referente de la cultura y el saber". Por ello piden a la gerencia que dé marcha atrás en su decisión.
