Muy comentada por vecinos de la ciudad y en las distintas redes sociales fue la presencia días atrás en la céntrica calle Olof Palme de un indigente que pedía acompañado por su gallo. Una estampa muy singular y anómala en la geografía urbana capitalina, que no pasó ni mucho menos desapercibida para aquellos que la contemplaron. Pronto la imagen pobló foros y bitácoras, convirtiéndose en objeto de comentarios de unos y otros.